Aquel primer topless del año disparó el escándalo. "Yo creo que no me lo voy a olvidar nunca más…", intuye Nicole Neumann. Nadie sabía que llevaba algunos meses soltera cuand o fue fotografiada en una playa vecina a José Ignacio sin corpiño y junto a un tal Nacho Herrero. La imagen pronto trepó hasta la tapa de las revistas. Nicole se apuró a salvar el buen nombre y honor de su ex pareja y recién entonces presentó a su nueva compañía: "Es músico y modelo, un viejo amor que volvió a mi vida", dijo.
Hoy la escena recrea el mismo cuadro. Ahora sucede en Miami, en la playa vecina al cruce de Ocean Drive y la tercera. La elección del lugar no fue antojadiza. "Venimos acá porque hay pocos argentinos", confesará luego. Nicole Neumann otra vez en topless. Siempre junto a Nacho Herrero, su novio. Ahora improvisan una sesión de fotos. Nacho apunta su cámara mientras Nicole provoca una inquietante performance. Lleva puesto un sombrero, un bikini que tiene grabado el lema Virgin y una pulsera. Nada más. El acto recién se interrumpe cuando descubren la presencia de un nuevo fotógrafo, profesional y argentino. Touchée, Nicole. Entonces, la primera lolita argentina se ofrece a la entrevista, dispuesta a hablar de su destape frente al Caribe.
-¿Para qué sacarse el corpiño, Nicole?
-Me gusta, me hace sentir libre. No me da pudor hacer topless. Además, por mi trabajo, necesito un bronceado sin marcas.
-¿Por qué supone que la mayoría de las argentinas esperan a cruzar la frontera para hacer topless?
-Yo no soy el caso. Me saco el corpiño cada vez que tomo sol en la terraza de mi casa. Y también hice topless en Punta del Este… ¿O no te acordás el escándalo que se armó en el verano?
-Imposible olvidarlo. Pero aquel topless fue en una playa solitaria. ¿Se animaría a repetirlo en un balneario argentino?
-No. Y tampoco me sentiría cómoda en topless, rodeada de amigos o familiares. Pero creo que cualquier chica que se saque el corpiño en la Argentina o en una playa pública de Punta del Este va a tener a todo el mundo mirándola. ¿Por qué? Curiosidad o falta de costumbre… No sé, jamás me detuve a pensarlo.
-¿La inhibe la mirada de los argentinos?
-En absoluto. Yo vivo expuesta a la mirada de todos, es mi trabajo. Y no tengo ningún pudor con mi cuerpo ni con el topless. Pero la idea de tomar sol sin corpiño es sentirse cómoda y relajada, algo que me parece imposible si tenés cincuenta pares de ojos clavados en el escote. Acá en Miami es distinto: la gente está más acostumbrada y nadie te pone el ojo encima.
-¿Quiere decir que una rubia de su calibre, sin corpiño, no llama la atención en Miami?
-Una chica linda, aún vestida, llama la atención. Siempre hay alguien que te hace un comentario. A veces pasa que hay una pareja cerca, y el chico, mientras abraza a su novia, te mira las lolas.
-Es decir que, en topless, usted sería capaz de reconocer a un argentino por su mirada.
-No sé. Pero si son dos los argentinos, seguro que llegan codeándose. Y uno dirá: "Mirá, no te lo pierdas, allá hay una chica en gomas".
-¿Alguna vez vivió una experiencia nudista?
-¿Sin bombacha? ¡Ni loca! No me sentiría cómoda. Un desnudo completo tiene que ver con la sensualidad, la seducción. Y eso me lo reservo exclusivamente para mi pareja.
Nicole Neumann llegó a Miami invitada por MTV. Aún tiene una limosina de la empresa a su disposición. Hace tan sólo algunas horas fue protagonista de una nueva entrega de los MTV Video Music Awards Latinoamérica. "Una fiesta súper glamorosa", asegura. Irrumpió en escena con vestido de lentejuelas y escote generoso. Y soportó imperturbable los piropos algo subidos de tono del prestigioso actor mexicano Miguel Rodarte. Sin embargo, fue durante los ensayos que cosechó uno de sus recuerdos más preciados: "Me convocaron para ensayar un día antes de la ceremonia. Y cuando llegué al teatro, me encuentro que sólo estábamos Lenny Kravitz y yo sobre el escenario. El tocaba su piano y ensayaba el tema que haría al día siguiente. Fue como tener un show exclusivo para mí", asegura Nicole. Todo está registrado en su cámara fotográfica digital, dice.
-A propósito, Nicole: ¿en sus días como cantante nunca fantaseó con recibir un premio como "la lengua" de MTV?
-(Ríe) Para nada. Pero hoy tengo la fantasía de entregarle un MTV Award a Nacho el día que saque su disco.
Nicole y Nacho habían programado cómo seguiría su noche para después de la ceremonia. Tenían entradas para ir a una fiesta en el hotel Delano y pretendían sorprender al amanecer en un after-after party. Por último, a las nueve de la mañana, irían a otra fiesta "de trajes de baño" -la más exclusiva entre las tantas post MTV Awards- en la mansión de Paulina Rubio. "Aunque quede pésimo, te tengo que decir la verdad -empieza Nicole-. Nosotros habíamos llegado a Miami el mismo día de la entrega de premios, a las cuatro de la mañana. Así que cuando terminaron la ceremonia volvimos al hotel con la idea de dormir dos horas y después salir hasta el amanecer. Me acosté con maquillaje y todo, pero nunca me pude despertar… Fue el único bajón en esta semana espectacular."
No necesito esconderme para sacarme el corpiño. ¿O no te acordás que mi último topless estuvo en todas las revistas?", chicanea la modelo.">
Nicole improvisa una rutina frente a la cámara de su novio, Nacho Herrero. "No necesito esconderme para sacarme el corpiño. ¿O no te acordás que mi último topless estuvo en todas las revistas?", chicanea la modelo.
Elegimos una playa sin muchos argentinos para pasar desapercibidos", confesarían después.">
El cuadro repite la misma escena del último verano. Aunque esta vez, en Miami, Nicole y Nacho parecen un poco más tímidos. "Elegimos una playa sin muchos argentinos para pasar desapercibidos", confesarían después.
