Ahí, sentado en el palco del estadio Vicente Calderón, Diego Maradona (47) tuvo una sensación extraña. Siempre había confesado que uno de sus mayores sueños era tener un hijo varón y verlo jugar en una cancha de fútbol. Y en ese momento, parte de ese anhelo se estaba volviendo realidad. A su lado, Giannina, su hija de 18 años, cámara de video en mano, filmaba todo lo que pasaba dentro de la cancha. O por lo menos, lo que a ella le importaba atesorar. Adentro, Sergio Agüero (19), la figura del Atlético de Madrid, el Chico de Oro, intentaba poner a su equipo en la semifinal de la Copa del Rey. Pero a pesar de que el Kun brilló y marcó uno de los goles que le permitieron al Aleti ganar por 3 a 2 ante el Valencia, a su equipo no le alcanzó y quedó afuera de la competencia. Unas horas después, fue el propio Diego quien intentó animarlo en la cena post-partido: “Sergio, hoy la rompiste. No me equivoqué cuando dije que tenías todas las condiciones para ser mi sucesor”.
A las doce y media de la noche, Diego y Giannina ingresaban a De María, el más argentino de los restaurantes de la capital española. Media hora después, el Kun llegó junto a varios de sus compañeros de equipo: el uruguayo Diego Forlán, Paulo Futre, Toni Muñoz y Javi García. Pero Agüero no compartió la mesa con sus colegas. Fue directamente hasta donde estaban los Maradona: besó a su novia y le dio un abrazo a Diego. Entre una buena parrillada, gaseosa y agua mineral, se quedaron hasta las tres y media de la mañana. Y delante de unos pocos testigos, Sergio Agüero y Giannina Maradona confirmaron su noviazgo.
LOVE STORY. El primer encuentro entre Giannina y el Kun fue a mediados del 2005, cuando Diego invitó al delantero –por aquel entonces– a su programa La Noche del Diez. Ella trabajaba en la producción y fue la encargada de asistir a Agüero y a Lionel Messi, otro de los invitados. Y según confesaron tiempo después, “en ese primer contacto hubo un flechazo. Por eso se intercambiaron los e-mails y los teléfonos”. Claro que las conversaciones fueron esporádicas, debido a que ambos estaban de novios. Agüero con Gisella, y Giannina con Marcelo, uno de los hermanos de Andrés D’Alessandro.
Pasó casi un año, y en junio de 2006 volvieron a verse en el vip de la disco Sunset, en Olivos. Los dos atravesaban momentos complicados en sus vidas sentimentales. Ella acababa de romper su relación con Marcelo, mientras que él le había pedido a su chica que se distanciaran un tiempo. En este segundo encuentro bailaron juntos toda la noche y se mostraron muy unidos ante sus amigos. Aunque siguieron en contacto vía mail y chat casi a diario, tuvo que pasar más de un año para que la relación se concretara. A mediados de 2007, Agüero vino a pasar sus vacaciones a la Argentina –ya separado definitivamente de Gisella–, y no perdió el tiempo: no bien aterrizó en Ezeiza llamó a Giannina. Salieron, y a los pocos días ya eran novios.
En el pequeño descanso de las Fiestas, el Kun obviamente estuvo con los Maradona, y Giannina –siempre ocultándose de los fotógrafos– lo fue a despedir al aeropuerto el 29 de diciembre, con la promesa de ir a visitarlo pronto. Así lo hizo, ya que desde mediados de enero comparte cada hora libre que tiene su novio, quien a fin de año fue considerado por la FIFA como el Mejor del Mundo entre los jugadores menores de 21 años. Y mucho mas ahora, que el crack se lesionó este domingo frente al Murcia, y tiene para diez días de recuperación.
“Sí… ¡Diego es mi suegro!”, le confesó Agüero a Fernando Niembro el pasado viernes 1º. “Al Kun le dije que sea feliz con la persona que tenga al lado. Y viéndola feliz a mi hija, está todo bien”, admitió Diego a unos periodistas españoles, antes de volar de Madrid a Buenos Aires. Era la confirmación definitiva de este amor que durante meses gambeteó los flashes de los paparazzi. Amor que viene tan en serio que hasta el propio Maradona ya se ve como un gran abuelo.
Viernes, tres y media de la madrugada. Sergio Agüero sale del restaurante De María en Madrid junto a Diego y Giannina, su novia. Es la primera foto de la pareja.
En la cena del jueves, Diego, Giannina y Agüero hablaron algo de fútbol y mucho del futuro de los chicos. Maradona considera al Kun como su sucesor en las canchas y ocupando un lugar ahora, también en el corazón de la menor de sus hijas.
En la cena del jueves, Diego, Giannina y Agüero hablaron algo de fútbol y mucho del futuro de los chicos. Maradona considera al Kun como su sucesor en las canchas y ocupando un lugar ahora, también en el corazón de la menor de sus hijas.
