En octubre se cumplen seis años de la noche en que Nicolás Scarpino (42) fue al teatro Broadway 2 –invitado por su amigo Emiliano Rella– a ver Las déspotas, un musical de Nicolás Pérez Costa. Salió sin recordarla.
“Dejé la sala y estaba en otra. Si me preguntás de qué se trataba la obra, no sé. Es que lo vi a Sergio sobre el escenario y me enamoré. Ya no pude pensar en otra cosa. No sabía nada de él... y perdí la cabeza. Nunca me había pasado algo así. Cuando me acerqué a saludarlo, fue como si hubiese visto a Robert De Niro en Broadway”, cuenta el intérprete de Los 39 escalones sobre su pasión a primera vista por Sergio Paglini (35, nacido en Tres Arroyos, actor y cantante).
BUSQUEDA, CUPIDO Y FIESTA. “Pensábamos hacer un festejo más chico y sin prensa. Pero la noticia trascendió y nos desbordó”, cuenta Nico minutos después de convertirse en hombre casado.
“Pero nos relajamos: no estamos haciendo otra cosa que hablar de amor. De eso se trata. Queremos dejarles un mensaje a aquellos que pelean por lo que sienten y tienen una historia como la nuestra”, confía Scarpino, cultor de un perfil muy bajo.
–¿Cómo peleaste vos por lo que sentías, Nico?
–Mi primer confidente fue Adrián, amigo y testigo de casamiento. Es como un hermano. Me ayudó a que mi sexualidad fluyera naturalmente. Cuando yo tenía 21 años, mi mamá se dio cuenta de que yo atravesaba una situación particular. Se acercó y me ayudó. Con sus inseguridades y temores, me aceptó incondicionalmente. Por eso fue tan lindo que estuviera ayer a mi lado, junto a mi papá. Con él yo nunca había hablado de esto hasta enero del año pasado. Es un tano que se vino de Italia de chico y creció en una familia con una educación estructurada. Mi temor, en aquel entonces, era desilusionarlo... Hasta te diría traicionarlo. Pero un día me acerqué y le dije que, por más que ya lo supiese, necesitaba decírselo yo mismo. Me contestó que si yo era feliz, él también (se quiebra y llora). ¿Sabés? Me di cuenta de que nosotros muchas veces prejuzgamos a nuestros padres... Fue difícil, pero sanador y muy lindo. Respecto a Sergio, a él lo ayudó su hermano Adrián, al iniciar una relación anterior. ¡Es tan importante que la familia te banque...! Por eso, para nosotros hoy esto es una gran fiesta. Siempre fui discreto, pero hoy quiero contar mi experiencia a viva voz, porque siento que estoy afianzado como actor. Lamentablemente uno teme que el trabajo sea condicionado por la sexualidad.
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¡Vivan los novios! Viernes 4 de septiembre, 11:15 horas. La pareja es agasajada por las decenas de afectos que se dieron cita en el Registro Civil (Sede Comunal 13) de avenida Cabildo al 3000.
“¡Sí, quiero!”. No faltaron las lágrimas al momento de los votos, cuando los novios intercambiaron alianzas.
Nico, feliz estampa la firma.
“En nuestro casamiento están quienes queríamos que estuviesen, aquellos que nos quieren”.
Antes de cortar la torta de bodas, los novios bromearon junto a Facundo Arana –compañero de Nico en la obra Poder... se puede– y María Susini.
La gran mesa familiar, donde los novios estuvieron amorosamente escoltados por sus respectivos padres. Junto a Scarpino, Rosa y Vicente, y a la izquierda de Sergio, Carlos y Pilar
“La primera vez que vi a Sergio fue sobre un escenario. Y de inmediato, me enamoré... Ya no pude pensar en otra cosa”
La mesa de los productores, liderada por Javier Faroni y Carlos Rottemberg.
“Me di cuenta de que muchas veces nosotros prejuzgamos a nuestros padres. Haber compartido este amor con ellos fue difícil, pero sanador y muy lindo”
