Fue maravilloso el 2019 para Natalia Denegri, quien se abocó de lleno a mostrar realidades e historias de vida a través de documentales y programas que le valieron 6 nuevos premios Emmy, sumando así 13 en su carrera.
Este fue un gran año para Natalia Denegri. Fue uno de los personajes del año de Gente, fue nombrada por People en español entre las 25 mujeres más poderosas por sus acciones solidarias junto a Hasbro Toys, recibió un premio del Congreso de los Estados Unidos y, como broche de oro, fue galardonada con 6 premios Emmy Suncoast. Con estos reconocimientos, la actriz y conductora radicada en Estados Unidos ya suma 13 estatuillas Emmy.
-¿2019 fue un buen año?
-Este fue un año de crecimiento en muchos aspectos realmente. En lo profesional puse énfasis en seguir aprendiendo con nuevos cursos de dicción, oratoria y actuación en Colombia; tomé cursos de actuación con Herney Luna (director de Sin senos si hay paraíso), produje impactantes documentales y participé en una miniserie de televisión. También crecí como persona al ver realidades tan distintas: desde niños sirios en el Líbano hasta las comunidades Wayuú en Colombia,, muchas veces olvidadas, con quienes compartí un tiempo en pleno desierto de la Guajira.
-¿Cómo fue la experiencia de subir al escenario con Nicole?
-¡Hermosa! Es una pequeña tradición: el año pasado también me acompañó. Ella forma parte de todo lo que hago, ya sea acompañándome en la sección Todo Niños de “Corazones Guerreros” o colaborando en los viajes solidarios. Le di el micrófono y además de decir que me amaba y que era la mejor mamá del mundo, instó a todos a ser solidarios. Ella lo es: donó sus juguetes y hasta el cepillo de dientes (risas) para los chicos de la Guajira que lo necesitan más. Es muy especial y me enorgullece día a día.
-Tus programas y documentales muestran gran interés social, ¿Qué te hace trabajar en esa línea?
-Me siento una persona muy afortunada, sé que mucha gente la pasa mal y no me pasa inadvertido. No puedo quedarme de brazos cruzados sabiendo que hay un niño que pasa hambre. Desde muy chica mi mamá y mi papá me enseñaron la importancia de ayudar a los que la están pasando mal y ahora no sólo quiero enseñárselo a mis hijos, sino a todos los que vean mis documentales. Dicen “ojos que no ven, corazón que no siente”. Quiero que vean, que sientan y que todos juntos hagamos algo.
-¿En qué estás trabajando para 2020?
-¡Un montón de proyectos! De algunos todavía no puedo hablar, pero estos cuatro me tienen muy entusiasmada. Primero, un documental sobre la última dictadura militar en nuestro país y la lucha de Abuelas de Plaza de Mayo. Otro es mi segunda película (coproducida entre Trinitus Productions y Epic in Motion) que ya está en pre-producción y se va a rodar totalmente en Europa como la primera (UMA) y tendrá actores de Hollywood. Es una historia de amor durante el fin de la Segunda Guerra Mundial. También terminamos un documental sobre la lucha de Bilma Corazón y las Madres del Paco para salvar a quienes caen en esa terrible adicción. Y, por último, algunos proyectos junto a Gregorio Pernia, el galán de Sin senos sí hay paraíso.
Jorge González, Maritza Bustamante -quién participó en uno de los episodios de Corazones Guerreros-, Natalia Denegri, Nelson Bustamante -productor de Corazones Guerreros y presentador venezolano- y su esposa Alessandra Correa, celebraron en la noche de los Emmy Suncoast. 
Herney Luna dirigió el documental Innocents (uno de los ganadores de la velada), Natalia Denegri, Estefania Monch Díaz, de Hasbro Toys -compañía con la que la conductora trabaja en acciones solidarias-, Alessandra Correa y Nelson Bustamante con sus premios tras la ceremonia.
-¿Qué significa ser una de las 25 latinas más poderosas de Estados Unidos según People en Español y haber sido premiada por el Congreso de los Estados Unidos?
-Es un verdadero honor ser reconocida de esa forma. Con mi equipo trabajamos incansablemente no sólo para llevarles productos de calidad a nuestros televidentes, sino también para ayudar a las comunidades de las que hablamos y alcanzarles todo lo que ellos necesitan. Cuando pasó lo del Huracán María en Puerto Rico, que es por lo que recibí estos reconocimientos, junto a la Fundación Hassenfeld nos encargamos de conseguir miles de donaciones de agua, comida, alimentos, juguetes y hasta dos aviones sanitarios y medicina gratuita para aquellos hermanos puertorriqueños que necesitaban atención urgente. Esta es, tal como decía antes, mi misión: ayudar y mostrarle al mundo la realidad que viven otras personas para que cada vez más se animen a ayudar.
