A esta altura, la relación que vivieron Luciana Salazar (30) y Martín Redrado (49) es una metáfora perfecta de la velocidad con que cambian las cosas (cómo nacen, cómo transcurren y cómo mueren desde las noticias hasta los amores) dentro de esta aldea global que forman los medios, las redes sociales como Twitter o Facebook, y los diarios y revistas en soporte virtual o el que sea. Si no, repasemos:
Martes 8 de febrero, en GENTE: “Ahora transito una etapa de enamoramiento. Pero hasta que no me sienta totalmente enamorada, no pienso hacer pública la relación. Soy muy celosa de mi privacidad”.
Jueves 10 de febrero, en Twitter: “Amigos tengo una primicia muy linda para darles… Había personas que se tenían que enterar antes que en una revista, y ahora ya lo saben. Queríamos compartir con ustedes nuestro amor. Nos adelantamos a San Valentín”.
Martes 15 de febrero, en GENTE: “Mi novio se puso celoso: sólo quiere que me desnude para él”.
Domingo 27 de febrero, en Twitter: “Es un día muy triste pero decido ponerle fin a esta relación con @martinredrado porque me desilusionó como hombre y ser humano”.
EL AMOR Y LOS TIEMPOS DE COLERA. El domingo 27 de febrero Luciana Salazar estalló. Estaba anémica, había bajado un par de kilos en los últimos dos días y sufrió una crisis de nervios, entonces su familia decidió llevarla al Sanatorio Otamendi. Cuando estuvo más tranquila se animó a publicar la causa de su angustia en Twitter: “Amigos, quería decirles que estoy totalmente desilusionada, me acabo de enterar de una gran mentira que me partió el alma. Una persona perversa”, apuntó a quemarropa a Martín Redrado.
Son varios los amigos en común que dicen que el reportaje que le dio Luciana a la revista Para Ti fue lo que detonó la bomba dentro de la pareja. La semana pasada Martín Redrado viajó a los Estados Unidos a presentar su libro, Sin Reservas, en la Universidad de Georgetown y a hablar sobre los países emergentes. Cuando regresó, el economista se encontró con esa nota donde Salazar hablaba del futuro de la pareja. Entonces el hombre vio que la relación que había empezado “a escondidas”, como una bolita de nieve, se había convertido en un alud imposible de frenar.
Y acá es donde comienzan a cruzarse las versiones: “Luciana iba en quinta y Martín no pasaba a segunda. Ella buscaba un hombre para casarse y tener hijos ya mismo. Martín, en cambio, se separó hace un año y estaba en otra: tenían proyectos distintos”, cuentan desde el entorno del economista. “Martín le mintió siempre. Cuando viajó a Washington no paraba de llamarla para controlarla: ´Si no me decís dónde estás todo el tiempo, no puedo confiar en vos y no podés ser mi novia´, le gritaba a Luli. Y ahora dice que se siente presionado”, agregan del lado de la diosa.
Este fin de semana, cuando la pareja se reencontró, no hubo cena ni desayuno romántico, sino que se pusieron sobre la mesa todos los temas que los dividían: Redrado le dijo que iba muy apurada, que estaba mediatizando la relación, que no debía hablar de sus hijos con ninguna revista –por aquella nota de Para Ti– y que ella dejaba las plumas porque quería cambiar su perfil, no porque él estaba celoso, como le dijo a GENTE. Pero lo peor vino después: “Desde que publicaste nuestra foto en Twitter no hacés más que presionarme… ¡Siempre querés un poco más!”, le habría dicho Redrado. Entonces ella explotó de impotencia y lo acusó de mentiroso, le gritó que quien generaba expectativas era él cuando no paraba de controlarla (“vos me viniste a buscar las dos veces, me dijiste que me extrañabas”, le habría recordado Luli), que ya la había traicionado una vez y no se lo iba a hacer dos veces: “¡Martín no me va a enfermar como ya hizo con su ex mujer!”, la escucharon decir sus amigos. ¿Por qué dijo esto? Porque Luciana tuvo que enfrentarse cara a cara con Ivana Pagés, cuando la ex mujer del economista fue a encararla mientras ella ensayaba para Bailando por un sueño. En medio de una crisis de nervios, con las manos temblorosas y delante de varios testigos, la morocha le pidió que dejara a su ex pareja porque ella quería volver a su lado. “Le mentía a ella, a sus dos hijos, a todos… y también me mintió a mí. Es un mentiroso y un hombre muy inseguro. Ya no quiero que me lastime más, me está enloqueciendo…”, le habría dicho Luli a sus íntimos entre lágrimas.
¿MENTIRAS SIN RESERVAS? La de este fin de sermana fue la segunda pelea entre Luciana Salazar y Martín Redrado, aunque por otro lado parece haber sido la última. La anterior ocurrió en octubre pasado cuando el economista se despidió de la modelo porque partía al exterior: “Es un viaje con mis hijos a Disney”, le habría dicho, pero Salazar no tardó en saber que Redrado había viajado a Disney con sus hijos… y su ex mujer. Según los más cercanos a Luli, ella decidió cortar en ese momento. En el medio, los dos tuvieron historias con otras personas, pero no funcionaron. “Entonces Martín volvió a buscarla”, siguen los amigos de la diosa: “En noviembre, para su cumpleaños, Redrado le mandó un mensaje desde París diciéndole que estaba pensando en ella y que la extrañaba… a Luli eso le tocó el corazón”. Y llegó la reconciliación.
El 21 de enero, el economista y la bailarina, modelo y vedette más provocativa partieron en viaje romántico a la República de las Islas Fiji, un lugar bien exótico y lejano, donde nadie podría encontrarlos. Ahora, desde el entorno de Luciana acusan: “Redrado es tan mentiroso que cuando se fueron de viaje le mintió a su familia y a la gente: en Twitter publicó que estaban en Shanghai por trabajo y se había escondido diez días en el Pacífico. A Luli le pidió que no dijera nada, tanto que ella en su cuenta de Twitter sólo escribió que estaba en Auckland, paso obligado hacia las islas”.
Lo cierto es que Luli siente que le dio muchas oportunidades y que él volvió a mentirle una y otra vez. “Una gran mentira que me partió el alma”, escribió enigmática. ¿De qué hablaba? La semana pasada, cuando Redrado estaba en los Estados Unidos, la blonda se habría enterado que siete días antes de la honey moon que vivieron en Fiji, el economista viajó al Caribe con su ex mujer. “Ella no lo presionaba por blanquear la relación como él quiere hacer creer, todos saben que Luciana jamás hizo público ningún romance, no es su estilo”, aseguran los amigos de Salazar.
Ahora, con las cartas echadas, muchos se preguntan quién salió más beneficiado en los siete meses de relación que vivieron Luciana Salazar y el ex presidente del BCRA, Martín Redrado. “El se hizo muy popular en su carrera política, gracias a Luciana”, dicen desde el entorno de Salazar. “A ella la beneficiaba estar con un tipo serio porque quería cambiar el perfil”, acusan del otro lado, jurando que esta historia se terminó. ¿Si habrá un nuevo capítulo? Esta vez, parece que no… 
Ahora Salazar comprende por qué Ivana Pagés, la mujer de Redrado, fue a buscarla en medio de un ataque de nervios para pedirle que deje a su ex marido. “Ella temblaba y yo no supe qué hacer… ahora sé que Martín la había enfermado como hizo conmigo”, le habría dicho Luli a sus amigos entre lágrimas.
El domingo, Redrado sólo salió de su casa de Belgrano para asistir al programa Hora Clave. Por la mañana, Luciana fue internada en el Otamendi.
El 10 de febrero, Luciana Salazar publicó la foto en Twitter que confirmó su noviazgo con Martín Redrado: “El estuvo de acuerdo después de que salió la tapa de Paparazzi para descomprimir la presión de los medios. Y todos saben que Luli no hacía nada sin consultarlo”, aseguran los amigos de la rubia.
