El líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, expuso en una extensa y sorpresiva entrevista, de más de tres horas y media, los motivos de la ruptura política con Alberto Fernández. También reclamó que se convoque a una mesa política del Frente de Todos para ordenar la interna. Además, se refirió al acuerdo con el FMI.
En la entrevista que le realizó el sábado el periodista Tomás Rebord y que se transmitió el domingo por Youtube, el diputado nacional confirmó las diferencias políticas y económicas que mantuvo el kirchnerismo con el Presidente, que se remontan a los días posteriores a la victoria en las PASO de 2019 y que se agudizaron durante todo el gobierno.
Sobre esa línea, el hijo de Cristina Kirchner expuso con detalle cada uno de esos roces que terminaron con su renuncia a la presidencia del bloque de Diputados y dieron indicios de un supuesto enfrentamiento con Alberto Fernández.
Asimismo, se cree que la ruptura se agravó en las últimas semanas con la decisión de Fernández de no acceder a los planteos del kirchnerismo de eliminar las PASO, desactivar su reelección y otorgar una suma fija para mejorar los ingresos más castigados por la inflación.
En ese sentido, en la entrevista, Máximo Kirchner reconoció que la desconfianza del kirchnerismo se remonta a los tiempos posteriores a las primarias, cuando se produjo una victoria inesperada por lo holgada: “Trabajamos muy bien hasta las PASO del 2019. Los 15 o 20 puntos de ventaja quizá afectaron. Como cuando vas subiendo la altura y te empezás a apunar un poquito. El poder es complejo, no es para cualquiera”.
Máximo habló de la interna del Frente de Todos
Respecto a la interna oficialista, Máximo Kirchner volvió a pedirle al presidente que convoque a una mesa política. Y dijo que en ese espacio para resolver la interna del Frente de Todos deberían estar: Cristina Kirchner, Sergio Massa (Frente Renovador), Héctor Daer (CGT), Emilio Pérsico (Movimiento Evita), Wado De Pedro (La Cámpora), gobernadores e intendentes.
“No necesitamos mesas tan chicas para problemas tan grandes, necesitamos mesas cada vez más grandes, más participativas, que integren. Y entender en la discusión y el debate que no todos tenemos por qué pensar igual, pero sí siempre con la responsabilidad de encontrar un punto de acuerdo”, expresó el diputado.
Tras ser consultado sobre si tenía intenciones de hablar con el presidente, el líder de La Cámpora no dudó en contestar: “Yo no. No tengo ganas. Ya pasó eso” y agregó: “No hay lugar para discutir. Cuando vas a debatir y discutir este tipo de cosas, no es para cumplir, es para resolver”.
Máximo Kirchner fue consultado sobre si las críticas son parte de una “narrativa opositora” al Gobierno y respondió: “Los que dicen que estamos boicoteando el Frente de Todos conversaban con el macrismo cuando nosotros conversábamos sobre cómo derrotar al macrismo”.
A su vez, el diputado advirtió que La Cámpora “nunca va para atrás” y defendió la permanencia de los funcionarios en cargos claves de la administración.
Máximo Kirchner cuestionó el acuerdo con el FMI
Por otra parte, respecto al acuerdo del FMI, Máximo Kirchner afirmó: “Lo del Fondo Monetario Internacional con Argentina es criminal. No está bien lo que están haciendo, es irracional, no es práctico. Cuando mirás la curva de vencimientos no hay una cuestión práctica, es impagable, está hecho para no pagarlo y si está hecho para no pagarlo es porque te van ir sacando más cosas, más cosas y más cosas en cada renegociación".
Bajo ese marco, el también presidente del PJ bonaerense presentó de manera pública una narrativa sobre la negociación con el FMI y aseguró que nadie quedó conforme porque terminó con el portazo de Martín Guzmán y agudizó una crisis que puso a la cuarta administración kirchnerista al borde del colapso.
