“Llegué a encerrarme en una burbuja, pero vencí mi timidez” – GENTE Online
 

“Llegué a encerrarme en una burbuja, pero vencí mi timidez”

Actualidad
Actualidad

Luciana era tan tímida que prefería jugar mal al hockey. Tenía apenas 20 años, y desde muy chica la señalaban como una superdotada, la futura estrella, una Maradona con faldas. “No podía cargar con ese peso, era demasiado. Una presión tan grande, que en la cancha ni pedía la pelota. No hablaba. Metida en mí, me sentía sin salida. Jugaba mucho menos de lo que podía hasta que mis entrenadores primero y después un psicólogo, me ayudaron a resolver los problemas. Le puse garra. Y acá estoy”. Está en la arena, Luciana. En topless. Enfrenta la cámara como nunca lo había hecho. ¿Tímida? Ese psicólogo sí que hizo un buen trabajo.

–Veo las fotos y me sale una sola palabra: sexy.
–Nooo, paraaá.

–¿No te ves sexy? Hacete cargo.
–Je. Me tendría que hacer cargo, ¿no?

–Y...
–Bueno, sí. Es que es una palabra muy fina: sexy. Guau.

–Nunca se te vio tan osada, Lucha.
–Nunca, es cierto. Había hecho algunas cositas... pero tanto, no. Es que me sentí cómoda. Y creo que quedaron lindas.

–Está claro que lo de la timidez quedó atrás, ¿no, Luciana?
–Pero cuesta, ¿eh? Hace diez años no sólo habría sido imposible una producción así... ¡Directamente, no daba notas! Cuando veía periodistas pasaba de largo. Me moría de vergüenza. Era demasiado introvertida.

–¿Cómo pasaste de eso a esta realidad? Modelo, conductora de TV...
–Fue todo un proceso. Cachito (Sergio) Vigil (entrenador y mentor de Las Leonas) me ayudó tanto... Me “obligó” a empezar a dar notas. Me decía: “Vos ya tenés un nombre. La gente quiere saber qué opinás, cómo sos, qué historia tenés. Hablá”. Y arranqué. Al principio les daba notas a periodistas que conocía desde hacía años. Con los demás no me animaba. Y de a poco me fui soltando. Hasta tuve que hacer cursos de comunicación.

–Mucha presión, pero también mucha autoexigencia, ¿no? Dicen que sos súper perfeccionista, una obsesiva.
–Es cierto. Y el psicoanálisis también contribuyó a manejar mejor ese aspecto mío. Gracias a cómo soy llegué a tanto. Pero también por culpa de cómo soy me frustro y angustio muy rápido.

–¿Sí? ¿Para tanto? Si te va fenómeno...
–No siempre las cosas salen como uno quiere. En la cancha y en la vida soy de exigirme mucho. No puedo esperar, soy ansiosa, quiero hacer todo bien... ¡y ya! En la tele me costó mucho aceptar que el aprendizaje es paulatino.

–Sin embargo, en la pantalla de Fox Sports se te vio muy suelta el año pasado...
–Al primer mes quería irme.

–¿Por...?
–Porque de entrada quería conducir como una experta. ¡Locuras mías! Mis compañeras, que son fenomenales, me calmaron y me hablaron. Que estuviera tranquila, que llevaba su tiempo. Aprendí mucho, y ya me veo mejor. En marzo vuelve la segunda temporada y voy a estar con más armas.

En agosto cumplirá 33 años. A fin de 2009, la Federación Internacional de Hockey la nombró la mejor jugadora del mundo por sexta vez, algo inédito en la historia de ese deporte. Una fuera de serie. Y –dicen quienes compartieron vestuario con ella– una gran persona. Humilde. Cálida. Trabajadora. Reina y obrera al mismo tiempo. La Leona leonina.
Ganó todo (salvo la esquiva Medalla de Oro olímpica), pero va por más: en septiembre próximo sueña con consagrarse campeona mundial. El certamen se disputa nada menos que en su Rosario natal. Y podría marcar su despedida de las canchas.

–¿Ganás el Mundial y te retirás ahí mismo?
–No sé. Nunca se sabe. Por ahí me siento mejor que nunca y decido seguir.

–¿Le tenés miedo al retiro?
–No. Estoy haciendo otras cosas, como modelar, conducir... Ya me estoy preparando para el día después. Y, a la vez, sé que va a tener su parte dura, de angustia, porque me va a faltar algo. Va a quedar un hueco difícil de llenar. A mí, los técnicos me dan el día libre y voy igual a entrenarme. Me gusta.

–Hablaste de modelar y venís de desfilar hace poco en Punta del Este con las chicas de Pancho Dotto, agencia a la que pertenecés. ¿Cómo te sentiste en medio de todas esas modelos consagradas?
–Lo primero que me dije fue: “¿Qué hago yo acá?”. Ja, ja... No, en serio: estuve tranquila, me sentí segura, por eso lo hice. Me divertí mucho. Pero, bueno: es parte de abrir puertas y caminos. Que la gente vea que las deportistas podemos trascender, que somos mujeres como cualquiera.

–¿Estás de novia?
–Ahora no... Corté hace poco... Pero no quiero hablar del tema. Estoy bien.

–¿Toda esa autoexigencia la llevás a tu vida amorosa?
–Digamos que me han tenido que soportar. Los deportistas tendemos a ser egoístas. Por ahí perdimos un partido y llegamos a casa de mal humor. Pero, bueno: también tengo cosas buenas, che. Van a pensar que soy un horror, ja, ja...

–¿Se te han acercado hombres por el solo hecho de ser famosa?
–Sí, y te das cuenta. Con ésos no quiero saber nada.

–Y después de estas fotos, ni te cuento. ¿Harías un desnudo alguna vez?
–No creo. Ya me hablaron de una revista y no quise.

–Pregunta servicio femenino: ¿el secreto para semejante lomazo? ¿Mucho hockey?
–El estado de ánimo. Eso es lo principal. Y cuidarme, claro. Hago dieta, me entreno, tengo decenas y decenas de cremas; tantas que ya no entran en el baño. Además tengo cosmetóloga y médico estético. Pero, de verdad, lo más importante es que me siento feliz. Lo demás viene solo. Lucha, impecable a sus 33 años. Le divierte mucho hacer fotos, y nunca había posado tan hot. ¿El resultado? Bueno... Está a la vista, ¿no?

Lucha, impecable a sus 33 años. Le divierte mucho hacer fotos, y nunca había posado tan hot. ¿El resultado? Bueno... Está a la vista, ¿no?

“<i>Para mucha gente, los deportistas no podemos hacer cosas como modelar o conducir; nos encasillan. Me gustaría abrir otros caminos. Demostrar que tenemos inquietudes, como cualquier persona</i>”.

Para mucha gente, los deportistas no podemos hacer cosas como modelar o conducir; nos encasillan. Me gustaría abrir otros caminos. Demostrar que tenemos inquietudes, como cualquier persona”.

“<i>Cada vez me animo más... Hasta desfilé con las chicas de Dotto, todo un desafío. ¿Un desnudo? No creo que llegue a tanto. Ya me lo propusieron y me negué</i>”.

Cada vez me animo más... Hasta desfilé con las chicas de Dotto, todo un desafío. ¿Un desnudo? No creo que llegue a tanto. Ya me lo propusieron y me negué”.

Más información en Gente

 

Más Revista Gente

 

Vínculo copiado al portapapeles.

3/9

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

Ant Sig