Mal no le va a Laurita Fernández (28). Protagoniza Sugar, la comedia musical que lidera la taquilla marplatense. Mientras que su chico, Nicolás Cabré (38) la acompaña de temporada con su hija Rufina (5). Porque la bailarina que fue jurado del Bailando durante el 2018 está instalada en La Feliz desde mediados de diciembre para ponerle el cuerpo al musical que produce Gustavo Yankelevich y dirige Arturo Puig.
Mientras que su novio –ya está de vacaciones después del doble personaje que hizo para Mi hermano es un clon (Pol-ka)– llegó a la ciudad a principios de mes. Y hace un par de días sumó a Rufina, la hija que tuvo con la China Suarez.
El sábado 11 a las dos de la tarde, en el balneario Bocas del Toro GENTE los encontró con la niña, entre juegos y castillos, a orillas del mar. Todo cuando el viento se hacía sentir y la temperatura alcanzaba la media marplatense. “¿Es Cabré?”, “Es Laurita?”, se preguntaban, sin molestaros.
Mientras la pareja del actor –que se recupera de un esguince de tobillo– y bailarina se metían al mar con Rufina, poco antes de volver a la carpa 1 del balneario ubicado al Sur de Mar del Plata. Y una vez arriba, sí se sacaron fotos con algún que otro fan.
El romance entre Laurita y Cabré había empezado hace tres meses, poco después de que el actor dejara su papel en Sugar y el elenco terminara con las funciones en Buenos Aires. Con Vico D'Alessandro en su lugar y Federico D’ Elía, la comedia musical debutó en Mar del Plata el 22 de diciembre en el Teatro Neptuno y ya es un éxito de dos funciones diarias los viernes y sábado.
Es más, según los primeros números de AADET –Asociación Argentina de Empresarios Teatrales– van dos semanas en las que Sugar lidera la recaudación seguida de cerca por Nuevamente juntos, la revista de primer nivel en la que Fede Bal -ex de Laurita– dirige a sus padres, Santiago y Carmen. Y porque ¡todo queda en familia!
Por Ana van Gelderen.
Fotos: Diego García.
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