A nivel mundial las enfermedades cardiovasculares son consideradas una de las principales causas de mortalidad. En Argentina el escenario no es distinto: en las estadísticas vitales de los últimos diez años publicadas por el Ministerio de Salud se evidencia que, tanto en hombres como en mujeres, el principal motivo de muerte documentada fue la enfermedad cardiovascular.
El primer punto para hablar de enfermedades cardiovasculares son las diferencias entre hombres y mujeres al momento de detectar la afección cardíaca en caso de mortalidad. De acuerdo a las estadísticas vitales del año 2019, en el varón la enfermedad cardiaca isquémica es la primera razón de fallecimiento seguida por la insuficiencia cardiaca. Por el contrario, en la mujer fueron la insuficiencia cardiaca primero y, en segundo lugar, el accidente cerebrovascular.
"La mujer tiene una expectativa de vida mayor que el varón en 4 a 8 años y estas diferencias se mantienen en las proyecciones de los siguientes 20 años", explican desde el IADT (Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento).
Factores de riesgo cardíaco: cuáles son y de qué manera impactan en la población
Existen también algunas diferencias en cuanto a los factores de riesgo y afecciones que condicionan la enfermedad cardiovascular en ambos sexos. Las mujeres se ven expuestas a los mismos factores de riesgo clásicos que el varón, por ejemplo: la hipertensión arterial, la diabetes, la obesidad, el sedentarismo y el tabaquismo, aunque operan de modos diferentes en el cuerpo. La hipertensión arterial en la mujer se asocia a mayor riesgo de padecer infarto agudo de miocardio según los datos de la encuesta nacional de factores de riesgo, la obesidad se encuentra en aumento y este factor de riesgo en la mujer se asocia mas frecuentemente con síndrome metabólico, dislipemia (en especial luego de la menopausia) y mayor incidencia de diabetes.
Con respecto del tabaquismo, a partir de la sanción de la ley anti tabaco del año 2011, este hábito mostró un positivo descenso gradual con un notable impacto positivo en la salud en ambos sexos. Además de estos factores de riesgo llamados convencionales o tradicionales, la mujer se ve expuesta a condiciones únicas ligadas al sexo femenino. Ciertas afecciones que ocurren durante el embarazo como la hipertensión gestacional, la preeclampsia y la diabetes gestacional se asocian a mayor riesgo de enfermedad cardiovascular en el futuro.
Al mismo tiempo, hay ciertas condiciones que no son exclusivas del sexo femenino pero que tienen en la mujer una clara prevalencia como el caso de las enfermedades autoinmunes, que producen un efecto inflamatorio crónico que, asociado al tratamiento con corticoides e inmunosupresores, impactan en la salud cardiovascular de la mujer.
Del mismo modo, aquellas mujeres que han padecido tumores ginecológicos, particularmente cáncer de mama, tienen mayor riesgo de padecer enfermedad cardiovascular futura debido al impacto cardiovascular del tratamiento oncológico. La depresión es otro factor de riesgo fuertemente asociado a enfermedad cardiovascular y esta entidad es mas frecuente también en la mujer.
Violencia de género
La violencia de género es un factor no convencional de riesgo en mas frecuente en la mujer y la evidencia muestra que aquellas mujeres que padecieron violencia de genero o abuso sexual tienen mayor prevalencia de depresión, obesidad y enfermedades cardiovasculares. Las condiciones socioeconómicas desfavorables operan en ambos géneros pero en las mujeres estos factores se asocian mas fuertemente a escolaridad incompleta, peores condiciones laborales, maternidad y crianza monoparental con postergación y descuido de la propia salud. El impacto negativo de estos factores operan en mujeres cis y transgénero.
Es real la evidencia de que la mujer consulta más tardíamente cuando tiene síntomas y que los síntomas de enfermedad cardiovascular en ella pueden ser diferentes a los clásicos, lo cual potencia la subestimación por la propia mujer y por los profesionales de la salud. Todas estas condiciones pueden explicar por qué a nivel mundial, en el año 2019, el 35% del total de muertes en mujeres fueron por causa cardiovascular. Estos datos alarmantes denuncian la necesidad de implementar campañas de información y concientización para estimular hábitos saludables y chequeos preventivos.
El Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento reconoce esta necesidad, se hace eco de las campañas que llevan este mensaje y cuenta con un consultorio de corazón y mujer dedicado a la prevención, diagnóstico precoz y tratamiento diferencial de la mujer, colaborando para mejorar la vida de las mujeres. Para más información sobre enfermedades cardíacas ingresá al sitio oficial de IADT.
