- Volvés a jugar con Los Pumas luego de la lesión.
- Sí,
finalmente. Me perdí los partidos contra Inglaterra y Sudáfrica.
Fue muy duro quedarme afuera, pero son las reglas del juego. Ahora estoy bien
físicamente y espero no sólo el test match contra Australia,
sino también la gira por Europa que emprendemos después.
-
En la Argentina los hinchas están ansiosos.
- Cuando recuerdo los
otros dos partidos que jugamos en River siento algo parecido. Fueron maravillosos:
grandes rivales, buenas actuaciones de nuestro seleccionado y marcos excepcionales.
Jugar allí significa mucho, es una experiencia diferente. El 2 de noviembre
será una fiesta.
- Van a enfrentar a Patricio Noriega (N. de
la R.: argentino nacionalizado australiano, quien jugó con Arbizu en Los
Pumas), ex compañero tuyo y figura de los Wallabies.
- En Francia
juego casi todos los fines de semana contra jugadores de Los Pumas. No siento
nada extraño o diferente cuando enfrento a un compañero.
-
Después de tu lesión ¿cómo llegás a la etapa
final del año con los Pumas?
- Me siento bien. Los entrenamientos
con Bordeaux son muy fuertes. Tenemos un preparador físico ucraniano
muy duro, que trabajó con los australianos en los últimos mundiales.
-
Ya se dio a conocer la zona de Argentina en el Mundial.
- Sí: Australia,
Irlanda, Rumania y Namibia. Pero nosotros queremos ir paso a paso. Pensamos en
el primer rival, que es Australia. Será un desafío increíble:
contra los locales, actuales campeones del mundo, y en el partido de inauguración.
-
Pero con Irlanda parece estar el gran duelo, la clave.
- Podemos hacer
miles de especulaciones, pero no nos conviene. Iremos pensando sólo en
Australia. Por Irlanda nos preocuparemos cuando sea el turno de enfrentarlos.
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El equipo volverá a contar con su capitán tradicional. "Ahora estoy bien físicamente", explica.
Como en dos de sus últimas y memorables actuaciones (en una casi logran derrotar a los All Blacks), el estadio de River será el escenario.
