Creí que iba a entrar como un dios vivo. Pero subió la escalera del estudio
Rocca-Cherniavsky como la subiría cualquiera. A eso de las dos de la tarde del
miércoles 29, en Palermo, tranquilo y en bermudas, mirando para arriba,
saludando con la voz que no suena mucho. Llega con Claudia, un poco acelerada.
Dalma y Gianinna habían entrado una hora antes. Ya estaban maquilladas,
tranquilas, esperando. Y Diego entra al estudio. El fotógrafo Gabriel Rocca,
productoras de moda, gente de moda, empleados de limpieza, Natalia Oreiro. Diego
hace su magia, un don que él y un puñado de personas nomás poseen en la historia
de la humanidad: el efecto parálisis. Porque a donde Diego vaya, todo se
paraliza. Sea en el palco de la cancha de Boca, o un estudio fotográfico. Todos
se congelan para verlo, y todos tienen en la mente un: "Diego, mirame". Y te
hace sonreír, te lo provoca. Aunque lo desprecies, o ni te importe, eso es lo
que te va a pasar. Y es genuino. Miércoles 29, a las 14: Diego y su magia.
El motivo es el siguiente: la campaña Todos para uno, uno para todos, de la
marca Ona Sáez, en prendas con la iconografía Disney, que serán vendidas a
partir de febrero. Diego, Natalia Oreiro y Julio Bocca -que realizó su sesión de
fotos el día anterior- serán las caras. Un peso de cada prenda será destinado a
dos organizaciones solidarias, torres de hierro en la pelea contra la
desnutrición infantil: la fundación CONIN, liderada por el doctor Abel Albino, y
el comedor Por Los Pibes, de Adrogué, con Norberto Ugarteche y Daniel Richieri
al frente. La primera, pionera en un modelo exitoso de combatir el hambre desde
la raíz, con nueve centros a través del país, dos en Paraguay y diez más en
cocción. La segunda asiste con alimentos, ropa y medicina a 160 chicos y madres
embarazadas en uno de los rincones más castigados del conurbano bonaerense. Para
el doctor Albino, la idea es poco más que fantástica: "Esto es solidaridad
concreta. Valores sobran. Lo que faltan son virtudes. Y acá hay virtud". Lo
dice, mientras mira a Diego pasar. Para Santiago Sáez, padre de la marca, la
idea viene con fuerza: "Son celebridades internacionales. Todo esto va a tener
mucha repercusión. Y a Diego le encantó la idea. Mucho más hacerlo con las
hijas".
-Diego, ¿por qué lo hacés?
-Viejo, lo hago con el corazón. Yo ya participé de varias campañas para los
chicos, y esto es lo que me arranca, lo que me enciende el corazón. Viendo los
noticieros en este país tan bendito, no podés ser tan ciego ante lo que los
chicos necesitan. Y además, hacer esta campaña con Dalma y Gianinna... El sueño
de todo padre es hacer algo con sus hijas. Así que…
Es cierto: Maradona nunca negó su figura al compromiso. Algunos recordarán, por
ejemplo, la Fundación Maradona. Por estos días, Juan Carlos Blumberg lo anda
buscando, para que le firme unas camisetas. Seguramente, no le dirá que no. De
eso se trata, en primera instancia, ser
El Diego de la gente.
Está con Dalma y Gianinna, frente al fotógrafo Rocca, frente a las
maquilladoras, productoras y peluqueros, mientras Claudia y Natalia Oreiro hacen
buenas migas.
"¿Y cómo está él?", es la pregunta de siempre, la de todos, la ineludible.
"Bien", es la respuesta de ahora, la que a simple vista se puede dar. Un Diego
amable y afable, hasta expansivo de a ratos, que disfruta, que pisa ancho y en
paz. Seguro, porque están Dalma y Gianinna. Porque está Claudia, aunque estén
separados. Ella lo asiste, lo organiza, cuando vienen todos, absolutamente
todos, a pedirle un autógrafo, a sacarse una foto. No se niega a ninguno. Diego
la va a abrazar fiero y fuerte al final del día, antes de irse. Cualquiera que
alguna vez armó una carpa lo sabe: la estaca puntal es la que más firme se
clava, la que aguanta la estructura. Para Diego, y su mundo en reconstrucción,
su mundo otra vez en camino, Claudia y sus hijas son la estaca puntal. Como
siempre. Después, Diego y la solidaridad. O Diego y el país.
-Antes, si nacías en Villa Fiorito, podías salir. Ahora, ¿qué?
-No ha cambiado nada desde que yo era chico. Hubo mucho verso. Y los políticos
no hicieron nada.
-¿Y la solidaridad de la gente hacia vos?
-Yo siempre la sentí. Y la de mi familia, porque su solidaridad es lo que me
rescata. La Argentina es un país solidario, pero cuando puede. Siempre que hay
para dar, los argentinos ponemos el pecho.
Diego lo está poniendo, en este preciso instante. ¿Y el futuro? ¿Qué caminos se
abren? Seguro, largos y sinuosos.
-Eso, Diego: el futuro.
-Volver a Cuba, quedarme en Cuba, y trabajar desde Cuba.
No dice cuándo, pero se supone que pronto. Y lo dice firme. Diego se va con
Claudia y con sus hijas. Después, será Cuba, y a continuar el tratamiento. Y
después de eso, será volver.
El sueño de todo padre es hacer algo con sus hijas, así que…".">
Diego, Dalma y Gianinna, a todo risas, para la cámara de Gabriel Rocca. Sobre la experiencia con sus hijas, el icono define: "El sueño de todo padre es hacer algo con sus hijas, así que…".
Más afecto para el clan Maradona. Para la sesión de fotos, jugaron sin inhibiciones ni timidez. Dalma y Giannina, divertidísimas. Diego, serenidad total.
