Mutó. Mutó frente a todos y a pesar de todo. Logró convertirse de ícono sexual a conductora, de modelo a vedette, de actriz de teatro a actriz de tevé. En lo personal, durante sus 34 años de permanencia en el planeta tierra, Karina Mazzocco también tuvo mudanzas y transformaciones.
La primera que recuerda, sucedió a sus doce años: "Nos mudamos con mi familia de Palermo a Belgrano, pasé del primario al secundario, me cambié del colegio Divino Corazón al Sagrado Corazón, de pensar sólo en muñecas pasé a poner toda mi atención en seducir a mi primer novio…".
La segunda, ocurrió a sus 24: "Empecé a tener mis primeros trabajos como modelo y conocí al hombre con el que iba a compartir el resto de mis días".
La tercera y última ocurrió recién, ahora nomás, a sus 34, y todavía la está padeciendo (o disfrutando, según el momento): "Tomé distancia de mi pareja después de diez años y me fui a vivir sola a Recoleta. Es una transmutación muy positiva ésta que vivo... Estoy aprendiendo a ser una mujer más segura, a elegir todo el tiempo qué quiero y qué no, a tomar decisiones muy importantes…"
KM EN EL AMOR. En esta etapa de decisiones importantes, está el amor. No quiere hablar de eso. Nada está definido todavía, se sabe. Pero, aunque no tenga ganas de decirlo, deberá resolver si se separa definitivamente de Ignacio Fonda (su pareja desde hace diez años, el hombre con el que pensaba compartir el resto de sus días) o si se reconcilian para siempre.
-¿Qué pasa con su pareja, o con su ex pareja…?
-Sinceramente, no quiero hablar de eso. Estoy en una etapa de mucho cambio, muy conectada conmigo misma, viendo qué quiero y qué no para mi vida. Me resulta imposible contestarte porque ni yo lo sé. Sí puedo contarte que estoy bien.
-Y en plena mutación…
-Yo muto permanentemente. Mis transformaciones son diarias, te diría. Trato de llegar todos los días a un lugar mejor. Uno cambia siempre, aunque intente resistirse.
-¿En qué y cuánto cambió?
-En un montón de cosas. Yo me siento otra mujer, otra profesional a la que la gente conoció hace unos años atrás. Y seguramente soy una mujer distinta a la que seré dentro de unos cinco años más. Ahora estoy intentando meditar. Lo hago en casa, trato de parar la mente, pero todavía no puedo relajar más de cinco minutos (ríe). Es complicado el tema. Voy una vez a la semana a una profesora de metafísica y también una vez a la semana hago terapia. Porque creo en la energía, en el poder del universo, pero también tengo los pies en la tierra.
-¿Por dónde tiene puesta la energía en este momento?
-…Mucha parte de ella está puesta en mi carrera.
-Una vez contó que sus padres estaban juntos desde los 14 años de edad y todavía andaban por la calle de la mano. ¿Le resulta un peso el no haber podido seguir ese ejemplo de pareja?
-Un peso no. Es maravilloso verlos así de enamorados. Por otro lado, es un modelo de familia muy fuerte. Hay muy pocas parejas, como la de mis padres, que logran subsistir tantos años juntos. Lo bueno es que ellos me inculcaron también que lo más importante en la vida debía ser el buscar la felicidad, cueste lo que cueste. Y yo estoy en eso.
KM EN EL ARTE. "La Mazzocco" -como ella dice que todos la llaman hoy- tiene la potencia puesta en su trabajo "artístico" -como define a todo lo que hace-. Y, de verdad, hizo de todo: debutó en el programa erótico De a dos, condujo Todos al diván, incursionó como vedette de la mano del cómico Nito Artaza, pisó las tablas con Monólogos de la vagina, hizo campañas gráficas de lencería y vivió -durante dos años consecutivos- el éxito de Grandiosas. Durante este mes de mayo, se probó como actriz en la telenovela Padre Coraje, donde hizo de una ex amante del protagonista, Facundo Arana.
-¿Le tocó el turno a la telenovela?
-En realidad eso fue un touch and go. Pero cuando leí el libro, me dije: ¿Por qué no? Fue muy raro llegar a un elenco que ya está armado, como sapo de otro pozo, pero todos mis compañeros me hicieron una devolución muy linda. Muchas actrices me llamaron la misma noche en que se transmitió el primer capítulo para decirme que les había gustado el trabajo.
-Incluido Adrián Suar.
-El no me llamó, pero me comentaron que él también quedó contento. Igual, ya te digo: acepté porque extraño horrores no estar en la pantalla, pero hoy apunto a otra cosa. Antes de fin de año conduciré Transformaciones, un docu-reality que tratará de personas que padecen un defecto físico y llegan al programa con la idea de operarse para cambiar. El tema es que no todos ellos irán al quirófano, pero sí todos sufrirán transformaciones que pueden ser estéticas y psicológicas. A partir de la historia del participante se verá qué se opera, y si se opera o no.
-De qué clase de operaciones hablamos.
-De una gordura extrema, de una nariz enorme, de orejas de elefante. Nada de chicas que quieren agrandarse el busto para que les caiga mejor la blusa. Lo que te puedo adelantar es que, por el perfil de personas que buscamos, el televidente verá que algo bueno le pase a esa persona.
KM POR FUERA Y POR DENTRO. Desde siempre adoró el protagonismo y la coquetería. Hoy, recuerda una anécdota de chica: "Más de una vez, mamá me encontró subida a la bañera, con la cara toda maquillada y actuando escenas inventadas frente al botiquín. Abría los espejos de los costados y jugaba a que era las trillizas de oro", recuerda hoy, muerta de risa.
A los 27 fue un ícono sexual. Y aunque hizo todo para despegarse de aquella chica que manejaba el erotismo frente a cámaras desde el programa De a dos, sigue despertando la libido de muchos hombres y la envidia de muchas mujeres.
-¿Y cómo se ve esta nueva Mazzocco, modelo 2004, frente al espejo?
-Hoy me veo mucho más sensual que sexy.
-¿La diferencia está en…?
-En que si provoco alguna fantasía, me hago cargo, pero no es mi objetivo principal. Antes, me identificaban como un ícono sexual, hoy soy "la Mazzocco" para todos. Hoy trato de transmitir otras cosas. Por ejemplo, estoy amadrinando la fundación de niñas con Síndrome de Rett. Es una enfermedad muy extraña que se da solamente en las mujeres de entre seis meses de vida y los cuatro años de edad y afecta el desarrollo motriz e intelectual de por vida. En la Argentina, hay algo más de dos mil casos, y la idea principal es poder difundir estos casos para poderlas ayudar con asistencia médica, contención psicológica y todo lo que necesiten ellas y sus familias porque, por el momento, estos casos no tienen cura.
-No conocía su veta solidaria.
-La tengo. Ayudar a la gente me da mucha felicidad. No alcanza ser bello por fuera, la belleza interior no tiene ningún tipo de competencia. Por eso, el programa Transformaciones sorprenderá a muchos. Estoy segura de que nos encontraremos con gente realmente linda interiormente.
-Pero no dejará de ser un proyecto pro cirugías...
-¿Y qué importa? Si una cirugía, al mejorar o cambiar cierto aspecto externo de una persona, hace que logre sentirse mejor interiormente, hemos cumplido el objetivo. Las operaciones estéticas no son un tema menor, ni un tema frívolo; siempre hay una razón mucho más profunda detrás de eso. Ahí está el interior del que hablo. Mi rol no sólo estará en conducir, sino en contener de cierta forma a esta gente.
-Y usted, ¿logra contenerse?
-Si no puedo, sé dónde buscar ayuda. Pero soy muy contenedora de mis amigos, y esta apuesta será un gran desafío.
por Mariana Montini
fotos: Claudio Divella
productor: Fabián Medina Flores. Peinó: Kany Castro.
maquilló: Sebastián Correa
(agradecemos a Lontè)
Medita, hace análisis y busca la felicidad ante todas las cosas. Así es la Mazzocco modelo 2004. Hoy, sus energías apuntan a regresar a la televisión, antes de fin de año, con un programa propio.
Estoy en una etapa de mucho cambio, muy conectada conmigo misma, viendo que quiero y que no para mi vida. Muto todo el tiempo. Mis transformaciones son diarias".">
"Estoy en una etapa de mucho cambio, muy conectada conmigo misma, viendo que quiero y que no para mi vida. Muto todo el tiempo. Mis transformaciones son diarias".
