«Hace doce años que hacemos las cosas mal. Y nos va bárbaro» – GENTE Online
 

"Hace doce años que hacemos las cosas mal. Y nos va bárbaro"

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Advertencia al lector: me las vi negras en este reportaje. No existe,
digamos, un momento en serio entre estos tipos. Es el ritmo del caos. Y más vale
seguirlo. Viene hace rato entre ellos. Nada menos que doce años. Para Diego
Capusotto -41, en pareja, padre de Elisa y Eva-, y Fabio Alberti -38, casado,
padre de Ciro y Teo-, fue larga la ruta, con el fuego del under, el inefable Cha
Cha Cha
, y más recientemente, Todo por 2 pesos, un programa que no fue baratija
alguna. Demencia de pura cepa. Le dieron, de paso, una originalísima cachetada
al humor de tevé. Y se convirtieron en un culto en sí mismos.

Ahora, es el teatro. Una Noche En Carlos Paz, Paseo La Plaza, en plena calle
Corrientes, de jueves a domingo. En cartel desde fines de marzo, ya superaron
las setenta funciones. ¿Sala llena? Casi siempre. Ya los vieron más de
veinticinco mil personas. Sería trabajo en vano definir aquí el show. Es ver
para creer, y reír. Hasta el punto del dolor. Algo que, tal vez, a los
argentinos nos venga en buena falta.

-Muchachos, ¿qué nos pasa? ¿Perdimos el sentido del humor?
Capusotto:
Yo veo mucha gente por la calle que perdió su sentido del humor. Y lo
anda buscando. A mí me preguntan: "Señor, ¿vio mi sentido del humor? Hace días
que no lo encuentro".

Alberti: Hay recompensa de trescientos pesos por encontrar un sentido del humor
perdido.

-¿Y la solución?
Alberti:
Fácil. La respuesta es fisiológica. La Argentina necesita c… bien de
risa.

-Se dijo durante mucho tiempo que ustedes eran humoristas de culto. Lo cual es
cierto: sus fans se desgarran las vestiduras por ustedes. Los veneran.
Capusotto:
¿Culto? Sí, yo pasé por varios. Antes iba a misa todos los domingos.
Después pasé a la macumba. Ahora, como Madonna, me convertí a la Kabbalah. Y así
como ella pasó a llamarse Esther, yo me llamo Ismael. Con ese seudónimo, voy a
escribir libros de autoayuda al estilo de Paulo Coelho, que en definitiva no van
a ayudar a nadie.
Alberti: En realidad, nos veneran los que tienen enfermedades venéreas. Con un
buen antibiótico, eso se cura. Ya no somos más de culto. Pasaron doce años desde
que Diego y yo laburamos juntos. Eso ya fue. Son motes que nos pusieron. Ni nos
preocupa ser de culto.
Capusotto: Es cierto, de cultos, nada. Con suerte, tenemos primer año de la
secundaria aprobado. Estamos integrados al sistema, al establishment, que es
algo así como una pastilla de menta.

-También se dijo que su humor era para un cierto ghetto de intelectuales.
Alberti:
Otro mote que nos pusieron, y como te decía, ya fue. Nunca hicimos nada
para que nos dijeran eso.
Capusotto: Eso nunca fue cierto. Hacemos humor para todo el mundo. Algunos lo
entienden, y otros no. Es como Dios. Algunos creen, otros no.
Alberti: Claro. Se comenta por estos días que Rivaldo va a jugar en Racing. ¡Eso
si es creer en Dios! (N. de la R.: Capusotto es fanático del equipo de
Avellaneda)

-Bueno, a lo de ustedes hay que buscarle la vuelta. Como vos decías, Diego. No
todos lo entienden.
Alberti:
No entiendo tu pregunta.
Capusotto: Bah, ¿cuán complicado puede ser lo nuestro? Julieta Prandi escribe
poesía, así que imaginate…

-El núcleo de Todo por 2 pesos fue reírse de los clichés de la televisión. Ahora
que están en el teatro, ¿qué les parece, por ejemplo, Los Roldán, y sus 40
puntos de rating?
Alberti:
Siempre va a haber un programa con un rating altísimo. A la hora de la
cena, la gente no va a apagar la tele. Son casillitas que se llenan.
¿Te parece que no tiene mérito?
Alberti: No, mérito tiene. Por algo tiene 40 puntos de rating.

-¿Tienen ganas de volver a la tele?
Capusotto:
Es que ya no es negocio hacer televisión. Antes fabricabas una tele,
y la gente la rompía en dos meses. Ahora, duran y duran.
Alberti: Claro, ahora hay que fabricar aparatos de DVD. Es la nueva onda.

-Por eso se están dedicando al teatro, claro…
Alberti:
Tiene sus ingredientes: mucha risa y acción. Si seguimos la lista, hay
sal, pimienta, comino y ají p… parió.
Capusotto: También es un show multimedia. Tenemos cinco pares de medias para
cada sketch. Iba a ser minimalista, pero Juan Carlos Velázquez, el Mini, que
laburaba con nosotros en Todo por 2 pesos, se fue para Indomables.

-Doce años juntos. Hablemos de la unión.
Alberti:
Fácil. Tenemos buena piel entre nosotros.
Capusotto: Nos mancomunamos mucho. Trabajar con mancos es esencial. Nos gusta
volar alto, en un trapecio, como Natalia Oreiro. Eso lleva a la confianza.

-Piel y confianza que los llevó a diferenciarse de los demás comediantes de este
país.
Capusotto:
La distancia es lo único que nos diferencia. Mi casa queda a veinte
kilómetros de la de Nito Artaza.
Alberti: Otros hacen las cosas bien. Nosotros las hacemos mal. ¿Viste? Doce años
haciendo las cosas mal. Y nos va bárbaro.

-¿Y qué llevaría a separar esta dupla?
Alberti: ¡
Que me gane el Monobingo! Bah, más allá de lo que hacemos juntos, cada
uno hace y puede hacer la suya, y no tiene por qué pedirle permiso al otro. No
nos va esa onda a lo Abbot y Costello.

-A ver. ¿Existe algo en serio entre ustedes?
Capusotto:
Sí. Vino Fabio una vez, se bajó los pantalones y me dijo que quería
tener sexo conmigo. "Pará, ¡me estás cargando!", le dije. "No, no, ¡es en
serio!
", me respondió.

-Por lo visto, la risa no para.
Capusotto:
Nah, un tipo que está jodiendo todo el día es un nabo. No me parece
una cualidad envidiable. Me dan ganas de meterle un tiro en la pierna.
Alberti: Yo jodo todo el día.

-Diego, honrá lo que dijiste.
Capusotto:
Nah, a un amigo no se le dispara. Los momentos serios los tengo
anotados. El mes pasado tuve diez. O sea que me quedaron veinte días de
felicidad.

-¿Ni en casa se detiene la locura?
Capusotto:
Digamos que no. A veces llamo a mi hija Elisa, que está en el
preescolar, y le digo con voz grave: "Sé donde vivííííís… ¡Te voy a raptaaaaar!"
Y se pone como loca. Después le digo que soy yo.

-Bueno, final de nota. Se los dejo a ustedes.
Alberti
: Espero, por el bien de los lectores, que en la próxima página haya una
buena minita.

Zapatos afuera para dos amos del absurdo. Sobre su vuelta a la tevé, son escépticos. Dicen: Ya no es negocio hacer televisión. Antes fabricabas un aparato y a los dos meses se rompía. Ahora duran y duran".">

Zapatos afuera para dos amos del absurdo. Sobre su vuelta a la tevé, son escépticos. Dicen: "Ya no es negocio hacer televisión. Antes fabricabas un aparato y a los dos meses se rompía. Ahora duran y duran".

Muerden de la misma pizza. Y no hay pelea. El secreto de la unión, según Capusotto, es el siguiente: Nos mancomunamos mucho. Trabajar con mancos es esencial".">

Muerden de la misma pizza. Y no hay pelea. El secreto de la unión, según Capusotto, es el siguiente: "Nos mancomunamos mucho. Trabajar con mancos es esencial".

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