“Este festejo es el mejor testimonio de su felicidad” – GENTE Online
 

“Este festejo es el mejor testimonio de su felicidad”

Actualidad
Actualidad

Caía la noche sobre el hotel Faena cuando sonó la primera nota de una larga lista de canciones. Se acercaban las diez y los invitados iban llegando, convocados todos por Ivana Figueiras (26), organizadora estelar que se hizo cargo del festejo de cumpleaños número cuarenta de Sebastián Ortega. El aniversario no pudo venirle mejor al productor y dueño de Underground, que si bien pasa un gran momento en lo profesional (entre otras cosas, por las siete estatuillas y el Martín Fierro de Oro que se llevó Graduados, serie de su producción), en lo personal venía con tiempos tormentosos por su separación de Guillermina Valdés. Pero según se vio el sábado, la familia decidió cambiar la cara, y de la mano de Ivana recuperó la tradición festiva y de unidad que acompaña al apellido Ortega.

Los primeros en llegar fueron Sebastián con Ivana y los chicos: Dante (12), Paloma (11) y Helena (8) –hijos de Ortega y Guillermina–, y Juanita (5) –de Ivana–. Después arribaron los padres de ambos, y a partir de entonces cada uno de los invitados. De la familia, los únicos ausentes fueron Martín Ortega, el hijo mayor del clan, y Rosario, que está de viaje por los Estados Unidos. El menú, al cuidado de Ivana y Julieta, que lo probaron minuciosamente durante la semana, fue una combinación de sushi con langostinos marinados, mesa de fiambres, varias ensaladas y barra de tragos canilla libre.

La acción empezó pasadas las once y media, cuando se proyectó un video en el que los hijos, la familia y los amigos le regalaron un mensaje de cumpleaños a Sebastián. Dante fue de los que más se explayaron en la grabación. Le agradeció, mientras su padre trataba de contener las lágrimas, “el viaje a Disney, cuando fuimos juntos a Roland Garros, y cuando me enseñaste a tocar la batería”.

Todos coincidieron en que si bien él no es muy amante de las celebraciones, que haya aceptado esta fiesta de sus 40 años (los cumplió el miércoles 14 de agosto) significa que estaba muy feliz. “Hay que mirar para adelante, y él lo está haciendo”, dijo su socio, Pablo Culell. “Sebas es un chico muy tranquilo, y además tiene una novia divina, que le organizó la fiesta. Nos llevamos muy bien con ella, por supuesto”, dijo Evangelina Salazar, la súper madre del clan Ortega. En la misma línea, Palito, el pater familias, no paró de sonreír: un gesto que sólo muestra los días de gran felicidad. Antes de entrar al salón para cantar (compartió el escenario con Sebastián), le dijo a GENTE: “Hoy hablaba con Evangelina y nos acordábamos de su primer día de clase. Lo llevé yo... ¡y ya celebramos sus cuarenta! Parece mentira, pero el paso del tiempo es inexorable. Cuarenta años son muchos. Pero no son los cuarenta de antes. Ahora, a esa edad se aprende mucho más. En mis tiempos era muy distinto”. Después, sobre el tema Guillermina definió: “La vida está hecha de momentos... Es como una paleta de pintor: tiene colores, matices, y uno tiene que saber ubicarse dentro de ella paleta. Los años son un permanente desafío para salir adelante, crecer espiritualmente y ser un poco más feliz. En nuestra familia siempre hablamos en ese sentido. Y después, cada uno encara la vida a su manera y trata de superar los problemas que se le presentan. La situación con Guillermina ya la enfrentó. Tiene todo absolutamente claro. Es una etapa terminada”.

Algunas horas después, la voz del mismo Palito se fundiría con la de Sebastián. Juntos subieron al escenario y cantaron el gran himno al optimismo, La felicidad, con su inolvidable estribillo: “Jajajajá” . Un buen síntoma... La a fiesta no paró hasta pasadas las cuatro de la mañana. Y todos se fueron tan alegres como habían llegado.

Evangelina Salazar, Marcelo Figueiras, padre de Ivana y su pareja la senadora María Laura Leguizamón, Ivana, Sebastián y Palito en la puerta del salón de fiestas del Faena, a pura sonrisa.

Evangelina Salazar, Marcelo Figueiras, padre de Ivana y su pareja la senadora María Laura Leguizamón, Ivana, Sebastián y Palito en la puerta del salón de fiestas del Faena, a pura sonrisa.

Palito en el escenario con Sebastián y sus nietos: cantaron a coro La felicidad.

Palito en el escenario con Sebastián y sus nietos: cantaron a coro La felicidad.

Ivana le organizó la fiesta a su novio, Sebastián, con la ayuda de Bárbara Diez. En la semana probó los platos y los tragos: chequeo imprescindible. Y nada falló. Sebastián demostró su felicidad besándola a cada paso.

Ivana le organizó la fiesta a su novio, Sebastián, con la ayuda de Bárbara Diez. En la semana probó los platos y los tragos: chequeo imprescindible. Y nada falló. Sebastián demostró su felicidad besándola a cada paso.

Más información en Gente

   

Vínculo copiado al portapapeles.

3/9

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

Ant Sig