Amo a mi familia y a mis amigos, y es hermoso compartir este sueño con todos ellos, mis grandes afectos”, le decía Florencia Torrente (22) a GENTE. Mientras, abrazaba a los invitados, repartía pines y miraba de reojo esos trece cuadros pintados durante el último tiempo. Esas obras le permitieron inaugurar, la semana pasada, la muestra All you need is love (Todo lo que necesitas es amor), que durante tanto tiempo planeó y ahora inauguró con otra pintora, Delfina Schinocca. Hoy abre sus puertas en la Galería Ohpen, de Cabrera 5033, Palermo.
“Es una meta cumplida –continuaba–. Porque desde que una profesora del secundario me abrió la cabeza al arte y elegí entonces tal orientación, descubrí que era lo mío. Después de estudiar en el Spring Studio de Nueva York, donde me la pasé dibujando personas vestidas, desnudas y disfrazadas y aprendí diferentes estilos y técnicas, ratifiqué mi pasión. Bueno, la suma de ello, expuesta en las pinturas sobre tela, los collages y las pequeñas instalaciones y expresiones gráficas que se observan acá, es el resultado de un camino elegido”, redondeaba quien llegó a su exposición luciendo unos anteojos rojos con marcos de corazones que generaron largas carcajadas en su abuela Rosita y en Adrián Suar, quien por pocos minutos no se cruzó con Araceli González. La misma Ara que llegó al ratito, junto a Fabián Mazzei y tras Rubén Torrente, el padre de Flor; Adrián González, el tío; Nicolás Cabré, ex de la artista, y Brenda Gandini, su famosa amiga.
¿Pero qué fue sucediendo allí adentro a lo largo de la tan ansiada presentación? Araceli y Rosita se declaraban primeras fans de Florencia. “A mí me encantan todos los cuadros –doblaba la apuesta la abuela–. Son muy intensos y expresan los sentimientos de Flor”, agregaba Rosa, acompañada de Lucho, su pareja desde hace cinco años, que además es coleccionista de cuadros de pintores argentinos.
“Mi hija es súper creativa y talentosa –continuaba Ara–. Tanto que me gustaría que no venda su cuadro La Pasión: lo quiero para mi casa de Pilar”, remataba la mamá más sexy del país. En tanto, Grace Bayala, curadora de la muestra, explicaba: “Florencia afronta el tema del amor con coraje y amplia libertad. La diversidad de obras que muestra define su pluralidad, multiplicada además por la presencia de espejos que, partidos en infinidad de trozos, simbolizan, según las propias palabras de Flor, la aceptación de uno mismo y la integración con el prójimo”.
Florencia miraba y escuchaba emocionada, comprobando cuánta energía iba recibiendo a través de frases, abrazos y saludos. “La pintura es mi cable a tierra. Lo que me inspira es la vida misma, lo cotidiano, lo de todos los días. Eso es lo que me hace crear”, cerraba la musa de tantos fotógrafos, hoy desde el otro lado: el de su protagonismo artístico.
Rosita, Florencia y Ara posan felices y emocionadas. Fue el jueves 14 de octubre, durante la apertura de la exhibición, en Cabrera 5033.
Flor al cierre de la inauguración, exhausta y feliz en la escalera de la galería.
Uno de los últimos en llegar fue su ex Nicolás Cabré, quien se encontró con Graciela Pal, su compañera en Botineras.
