El país de los canguros vive una de las peores crisis de su historia. El fuego arrasó con 8,4 millones de hectáreas de bosques y más de un millón de animales perdieron la vida. La gente salió de sus casas y comenzó una desesperaba búsqueda de rescate. Y el video de este Koala, animal que hoy se encuentra en peligro de extinción, es un fiel reflejo de lo que el ser humano le está haciendo al planeta.
Los incendios de Australia que se iniciaron en el mes de septiembre están considerados como una de las peores catástrofes mundiales. Más de 8,4 millones de hectáreas de bosques fueron arrasadas por el fuego y donde había vida y árboles verdes, sólo quedaron cenizas. Organismos internacionales aseguran que más de mil millones de animales murieron a causa del fuego y que existen animales en peligro de extinción.
Aunque las lluvias trajeron un poco de alivio, el fuego no está extinto del todo, quedan varios focos de incendios y su selva tropical agoniza. Y en medios de esas imágenes dantescas, la gente que pudo salvar su casa, se unió al rescate de los animales. En este momento, miles de rescatistas voluntarios libran una batalla contra el tiempo para intentar salvar al mayor número posible de animales, incluidos los koalas, víctimas de los incendios en la isla Canguro, el santuario natural de Australia.
Ubicada en el sur del país, este lugar es un santuario de animales, pero más de la mitad del lugar se encuentra carbonizado. Y de todos los animales, los koalas fueron los que se llevaron la peor parte. Se estima que de los 46 mil que había antes de que se inicie el fuego, solo pudieron sobrevivir cerca de nueve mil. Y los que consiguieron tamaña proeza, están heridos y agobiados. Y necesitan la asistencia del hombre. La mayoría de ellos tienen las patas quemadas y necesitan como mínimo cuatro semanas de tratamiento.
El primer ministro Scott Morrison anunció una partida de 50 millones de dólares para Fauna y Vida Silvestre, pero la gente decidió no esperar que llegue ningún tipo de ayuda. Miles de voluntarios se sumaron al rescate y pusieron sus casas para que funciones como “Hospitales temporarios de animales”. Se colocaron alrededor de 300 cajas nidos para las comadrejas y se instalaron 80 estaciones de alimentos y agua en una sola semana.
Y en una de estas estaciones fue donde apareció uno de los koalas a beber agua y se produjo este video enternecedor que hoy conmueve y hace llorar al mundo. Porque el animal toma la mano del voluntario que le está dando agua en una botella y con un simple gesto le pide que le de un poco más. Para verlo una y mil veces. Para entender lo que el ser humano le está haciendo al planeta. Porque hoy Australia es el vórtice de la catástrofe climática y la destrucción ecológica es incalculable.
Uno de los animales más valiosos de la isla es una subespecie de la cacatúa de Latham que desapareció en el continente y para alarma de los rescatistas, todavía hoy no escucharon ningún pájaro cantar mientras recorrían la isla. Otro motivo de preocupación son los ‘dunnarts’, pequeños ratones marsupiales grises que antes de los incendios quedaban unos 500 y estaban en vía de extinción. Es probable que hoy no quede ninguno.
Pero los rescatistas le dan prioridad a salvar a los koalas, cuya población en esta isla es la única en Australia libre de clamidia, una infección mortal. De la cantidad que puedan salvar estos héroes anónimos, depende en gran parte el futuro de la especie. Porque según la ministra australiana de Medio Ambiente Sussan Ley informó esta semana que “por primera vez en la historia, los koalas podrían estar en peligro de extinción”. Es que tras ser rescatados, todos son llevados a estos refugios improvisados por la gente. Y la alegría llega cuando después de caminar varias horas por páramos desolados, aparace un bebé animal en medio de las cenizas. Y la tristeza los embarga cuando, por la gravedad de esas heridas, deben ser sacrificados.
