El increíble crepúsculo de La Mansa, la imponencia del Hotel Conrad, el eterno fanatismo por las criaturas más bellas del país (léase diosas), la fascinación general por el latino Cristian Castro, el peculiar estilo del anfitrión... A las siete y media del 11 de enero, la tarde de Punta del Este volvió a teñirse de glamour: comenzaba el clásico de los clásicos del verano, el desfile de Roberto Giordano.
DEL URUGUAY PARA LATINOAMERICA. Vestido de negro, con varios kilos menos, RG recorrió a fuerza de sonrisas los 30 metros del escenario y comenzó su habitual discurso de presentación. "Agradezco a mis amigos del Uruguay, Argentina, Turquía y del mundo por acompañarme una vez más... Recuerdo aquel chico humilde de Quilmes que barría la peluquería y soñaba con abrir una propia. Hoy tengo 20 salones y 500 colaboradores. Sin ellos, no sería posible organizar semejante encuentro. Este desfile es una apuesta al futuro". Y dio el puntapié a un arranque con todo, que puso a 300 modelos top sobre la pasarela, luciendo las colecciones de 20 diseñadores.
HINCHADA VIP. Sebastián Estevanez, de novio con Ivana Saccani, no se perdió ni una pasada de su chica, y despertó suspiros en la platea femenina. Muy cerca, el padre y productor Quique Estevanez y la actriz Betina O´Connell disfrutaban al pie de la pasarela. También llevó hinchada propia Sofía Zamolo. Su mamá, Cristina, su papá, Diether, y su novio, el corredor de autos Rodolfo de Alzaga, aplaudieron de pie cada vez que "la nena" surgía en escena. Martín Barrantes viajó especialmente a Punta para vitorear a su mujer, Carolina Pampita Ardohain.
INVITADO POP. Llegó tarde, escoltado por un grupo de fieles amigos de México y Argentina. El cantante Cristian Castro fue el hombre más acosado de la noche. Casi aplastado por sus fans, firmó más de 700 autógrafos. ¿El look? Cabello teñido de negro con mechón blanco y saco formal. "Las argentinas son las mujeres más increíbles del planeta", le comentó a Mirtha, la esposa del peluquero. Desde la primera fila saludó a su ex "cuñada" Nicole (el cantante salió con Valeria Liberman, la hermana de Matías, actual novio de la modelo) y se sacó fotos con una agenda Palm último modelo, cámara digital incluida.
SORPRESAS Y MEDIA. Hubo, y al por mayor. Una: el anfitrión contó que el 25 de mayo partirá con toda su troupe a París para realizar su megadesfile. Dos: el turno de los fierros. Los autos de lujo coparon la pasarela: Graciela Alfano llegó vestida de blanco en una limousine Lincoln, Julieta Prandi salió a bordo de un MG blanco convertible, y Giordano hizo lo suyo en un Mustang verde. Y tres, la frutilla del postre: el corte de pelo in situ realizado por el peluquero. ¿La protagonista? Juana Grueber, una uruguaya que Roberto descubrió en una playa y ahora quiere lanzar a la fama, "como lo hice alguna vez con Valeria Mazza". Inédito.
PASADA HOT. El clímax ocurrió de la mano de revista GENTE. Fiel a su estilo, la pasarela fue copada por las diosas más deseadas del 2002/03. Abrió la pasada Julieta Prandi, la nena. Por detrás aparecieron Liz Solari, Sofía Zamolo, Pampita Ardohain, Irupé Morinigo, Natalia Graciano, Loli López, Julieta Spina, Rocío Guirao Díaz, Denise Dumas, Soledad Solaro, Ingrid Grudke y el cierre impactante, con Dolores Barreiro. Las chicas desfilaron en originalísimos jeans de Kosiuko, abiertos a los costados y con plumas y detalles. Los bikinis de Class Life blancos con el logo de GENTE en turquesa y los zapatos plateados de Ricky Sarkany completaron el atuendo hot. Dolo Barreiro lució una pollera de broderie blanco supersensual. Al final, la gran sorpresa. Los jeans -con velcro en los costados, que hacía que se desabrocharan con facilidad- volaron por los aires al mejor estilo striptease. El público aplaudió eufórico los mejores cuerpos.
FINAL. Pasadas las nueve de la noche, Giordano copó la pasarela para despedirse de su público. "Miren al cielo", anunció. Y estallaron los fuegos artificiales. Patricia Miccio junto a su hijo Francis -a la que muchas señalaron como "un bombón"- levantó su botellita de champagne POP de Pommery en señal de brindis. La siguieron todos los invitados. Poco a poco, las tres mil almas abandonaron las tribunas tubulares del Conrad mientras el cielo seguía iluminado.
EL CONRAD DE FIESTA. El lujoso Salón Montecarlo del Conrad se vistió de gala para la clásica cena vip postfashion, con 300 invitados. La gastronomía estuvo a cargo del chef Eric Colombo. Hubo entradas frías, selección de fiambres y quesos, costillas de cordero, pastas, pescado y mesa de dulces. Después del excelente show en vivo de Magalí Bachor -ex integrante del jurado de Popstars-, Giordano tomó una vez más el micrófono. "Este es el último desfile que hago en Punta del Este -comentó. El silencio invadió la playa Mansa. -... del 2003 -añadió-. El 10 de enero del 2004 volveremos a hacerlo, como siempre, en el Conrad", aclaró ante la multitud que aplaudía. Luego entregó una distinción a Jorge Serna, vicepresidente del casino más grande de Sudamérica, que fue recibida por su hija Carolina. Por último, un show en vivo de old hits y música disco. Todos terminaron a pleno dancing. Otro desfile de Giordano llegaba a su fin…
por María Noel Alvarez y Manuel Sarrabayrouse
fotos: Santiago Turienzo, Alejandro Carra, Diego Soldini y Leandro Montini
producción: Sofía Delger
Catorce de las modelos top desfilaron para GENTE. Jeans Kosiuko y minibiks Class Life para los mejores cuerpos de la Argentina y, para terminar, un striptease sorpresa que dejó atónitos a los tres mil espectadores.
El momento más hot de la noche en la pasada de GENTE: las chicas se desvisten y despegan los velcros de los pantalones de Kosiuko.
