Son las nueve de la noche y el Luna Park está colmado. Es viernes 1º de septiembre y la gira Love + Dance World, de Luis Fonsi (39), el artista que con su hit Despacito lleva dieciséis semanas consecutivas en el primer puesto de la lista de éxitos Billboard, hará una de sus últimas presentaciones en nuestro país. Ya no entra nadie, si bien mucha gente fue hasta la puerta para comprobar con sus propios ojos que las localidades están agotadas. Pero van pasando los minutos y el show no arranca. ¿El motivo? Un grupo de fans que vienen de Mar del Plata se retrasó porque la marcha por Santiago Maldonado colapsó la Capital Federal. “Luis se enteró de que el grupo estaba demorado y pidió retrasar el show. Lo mismo pasó la semana anterior, cuando se presentó en el Estadio Municipal de Dolores: hasta que no ingresó la última persona no arrancó”, informan los encargados de la gira. Aunque el boricua se convirtió en un fenómeno mundial, su esencia no cambió. Mantiene intactas sus costumbres, aun después de que el tema que compuso con Daddy Yankee lo convirtiera en “el hombre del momento”. Los números de su éxito hablan por sí solos: Despacito supera los 3.500 millones de visitas en YouTube y acumula más de 5.000 millones de reproducciones en plataformas de streaming, lo que la convierte en la canción más viralizada de la historia.
“Mi peor defecto es la ansiedad: ¡quiero todo ya! Que el éxito de mi carrera se llame Despacito es casi una ironía del destino”, se le escuchó decir antes de ingresar al vip del Banco Macro, donde Jorge Brito, su esposa Marcela y sus cinco nietas se sacarán la foto junto al artista que, de muy buen humor, se anima a levantar a la más pequeña en brazos. Por ahí, en ese abrazo con los chicos, descarga algo de su añoranza por no tener cerca a Micaela (5) y Rocco (nueve meses), sus hijos con la modelo Agueda López (35). “En las giras, la familia es lo que más se extraña... Mucho más cuando tienes los niños tan pequeños. En este momento quisiera cambiarle los pañales a Rocco, o correr con Mica por la casa... Por suerte. las comunicaciones hicieron que la distancia sea más llevadera”, sostiene con franqueza.
–¿A veces tu esposa te acompaña?
–Antes de que nacieran los chicos sí, ahora se complica. Lo que no cambió es nuestro amor. La conocí en un estudio de fotografía y quedé impactado. Y después de tres años de convivencia, nos casamos. Le propuse matrimonio en París, en el Puente de los Candados.
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Para un hombre que cultiva el bajo perfil, estas confesiones no abundan. Amante de la aviación y el paracaidismo, cuenta que tiene “más de 250 saltos desde aviones y helicópteros”, un hobby que debió dejar de disfrutar debido al crecimiento exponencial de su carrera en el último año. Una carrera en la que ya grabó siete discos cargados de amor, y un hit que felizmente lo perseguirá para siempre: “¡Jamás imaginé que una canción mía se iba a bailar en Japón! Despacito nos llenó y nos sigue llenando de sorpresas. La gente la aceptó desde el primer día y la convirtió en un fenómeno mundial”, cuenta feliz. También se autoproclamó devoto del asado argentino: “No hay dudas de que acá cocinan las carnes más ricas del mundo”, nos halaga.
–¿Cómo hace el hombre que ama volar para, después de semejante éxito, mantener los pies sobre la tierra?
–Nunca me la creí. Mis papás, Delia y Alfonso, me criaron con bases sólidas. Ellos me enseñaron a tratar de tocar el cielo, pero sin levantar los pies del suelo.
–Algo que sí hizo el público argentino, que no paró de saltar y gozar tus recitales.
–No me sorprende. Los conozco bien desde hace años y, como en toda América, es gente muy cálida. Les agradezco tanta muestra de cariño. Como embajador de Puerto Rico, les recomiendo que visiten mi país: igual que Despacito, los va a enamorar.
Love + Dance World se presentó en La Rioja, Mendoza, Córdoba, Rosario, Tucumán, Salta, Corrientes, Dolores, y culminó –con auspicio del Banco Macro– en el Luna Park.
La gira triunfal de Luis Fonsi duró quince días, entre aeropuertos (1) y rutas, y tuvo su cierre el viernes, sábado y domingo en el Luna Park.
Sensualidad, buena música, la mejor vibra: así fue el paso del boricua por nuestro país. Lo acompañó un staff de 25 personas entre bailarines, músicos y técnicos. En el escenario cuenta con un gran despliegue, con pantallas de última generación y efectos especiales. Sus números asombran: Despacito supera los 3.500 millones de visitas en YouTube y acumula más de 5.000 millones de reproducciones en plataformas de streaming, lo que lo ha transformado en el tema más viralizado de la historia.
