No voy a hacerle un cuarto todo rosa: usaré todas las tonalidades de las flores”, dice Dolores Barreiro (40) mientras acaricia su pancita de siete meses.
Sentada frente al Pacífico, en las maravillosas playas de Bahía de Banderas en Nuevo Vallarta, México, la top espera a su primera hija mujer, luego de cuatro varones.
“Tengo fecha para el 28 de octubre. Va a ser la primera escorpiana de la familia. En casa estamos todos revolucionados. La bebé será nuestra reina”, agrega. Feliz junto a su marido Matías Camisani (44) y sus hijos Valentino (13), Salvador (10), Milo (8) y Suria (3), se tomó una semana de descanso en el lujoso hotel Grand Velas Riviera Nayarit. “Amamos viajar en familia. Nos une, nos enriquece y nos ayuda a crecer”, dice.
Incansable, la conductora de Noches fashion TV, a la medianoche de El Trece, y dueña desde hace cinco años de su propia marca de ropa, Holi, Dolores asegura: “Disfruto mucho de los cambios que se van produciendo en mi cuerpo. Me siento muy plena y llena de energía cuando estoy embarazada. Me encanta ser mamá”.
¿Está bueno ser una familia numerosa? “¡Es hermoso! Nosotros somos seis hermanos, y Mati tiene dos. Me gustan las mesas enormes, que seamos muchos a la hora de comer, esa imagen de gente entrando y saliendo todo el tiempo, una casa muy llena de vida...”, confiesa.
¿Y qué dicen los hermanos? “Los chicos están que no lo pueden creer. Todos imaginábamos que venía otro varón. ¡Pobrecita...! Con tanto hombre en la casa va a ser súper difícil que le aprueben un novio”, se ríe.
Aunque aún no decidieron el nombre, en cada uno de los viajes que hicieron durante el embarazo le compraron un regalito a la beba, que llegará en dos meses. “Tendremos que acostumbrarnos al universo de las princesas y los cuentos de hadas”, finalizan a dúo.
Con sus cuatro hombres. “Es hermoso tener una familia numerosa”, dice la top. La pareja pasó una semana increíble en México junto a sus hijos Valentino (13), Salvador (10), Milo (8) y Suria (3).
Se alojaron en la Suite Presidencial del hotel Grand Velas Riviera Nayarit, con fabulosa vista al mar.
Un all inclusive de lujo, donde los chicos practicaban deportes y ellos se hacían tiempo para comiditas románticas.
“Los viajes en familia son los más lindos y enriquecedores. Nos escuchamos y compartimos cada minuto”, confiesan.
“Disfruto mucho de los cambios que se van produciendo en mi cuerpo durante el embarazo. Me siento muy plena y llena de energía. Me encanta ser mamá”
