Luego de aplazar el estreno mundial de Mulan y de cerrar todos sus parques temáticos, Disney tomó otra drástica decisión para evitar la propagación del Covid-19: suspendió todas las producciones de películas no animadas.
Es así que la versión con actores reales de “La Sirenita” que comenzaba a filmarse en unos días en Londres, retrasa su rodaje.
También se retrasarán el thriller de Guillermo del Toro "Nightmare Alley", el drama de Ridley Scott "The Last Duel" y la siguiente entrega de "Home Alone".
La compañía aclaró en un comunicado, enviado por correo electrónico, que no han tenido casos casos confirmados de coronavirus en sus producciones
“Si bien no se han confirmado casos de COVID-19 en nuestras producciones, después de considerar el entorno actual y de buscar el interés de nuestros elencos y equipos, hemos tomado la decisión de detener la producción de algunas de nuestras películas de acción en vivo por un corto tiempo", dijo un portavoz de Disney en un comunicado.
