Falta un mes, días más, días menos, para que nazca Morena Echarri en la
Clínica Suizo Argentina. Pablo y Nancy empiezan a entrar en el inquieto
territorio de la recta final, donde la ansiedad se vuelve incontrolable y cada
minuto es un largo e interminable suplicio.
Las abuelas (la abuela Echarri, la abuela Dupláa) tejen toda clase de baby
saquitos, baby escarpines, baby mantillas en colores pastel y cuidan a Nancy que
está ñanosa, hipersensible, según cuentan. "Toda la familia quiere que Morena
tenga la cara de Pablo y los ojos de Nancy. Los dos quisieron y pensaron desde
el principio que iban a tener una nena. Hoy el sueño se les está por cumplir",
contó una persona muy allegada a la pareja.
LOS PRIMEROS MESES. Nancy no los pasó muy bien. Esta vez, sufrió el calor del
verano porteño, tenía dolores de cabeza y contracturas. "Ante cada síntoma o
movimiento de la beba, me emociono. A veces también, como padre primerizo que
soy, me preocupo. Por suerte Nancy, que tiene más experiencia, está ahí para
tranquilizarme", dijo Pablo Echarri cuando los medios los encararon en la fiesta
por los 120 capítulos de Resisitiré. Durante el embarazo, Nancy engordó siete
kilos más de los que había subido durante los nueve meses que llevó a Luca, el
hijo que tuvo con Matías Martin, en su vientre. "Nancy a veces se siente
gordita, pero para mí está hermosa. Es lógico que esté sensible, que se sienta
con la cara más hinchada, y que se aproveche, como toda mujer, para que la supermalcríe", se quejaba, divertido, el futuro padre.
La lista de deberes que, embarazada, Nancy reclama de Pablo incluye: mimos,
cocinar, mimos, comprarle helado, mimos… Dice, resignado, Echarri: "Nancy no
tiene antojos, sino deseos y yo se los cumplo todo el tiempo. Para mí, es mi
chica superpoderosa. Se lo digo y ella sonríe".
FAMILIA FULL TIME. Nancy hace gimnasia tres veces por semana. También va a
natación, lleva a Luca al jardín -después lo retira su papá, Matías Martin-,
hace el curso de pre-parto, estudia guitarra con Gabriel Menéndez -a su padre le
gustaría que ella aprendiera a tocar tangos, pero Nancy prefiere interpretar
temas de los Beatles-, duerme cuando puede, sale a pasear con su amiga Roxy, va
con Pablo a realizarse todas las ecografías y, jamás lo olvida, visita a sus
padres en su casa de Villa Urquiza.
Pablo tiene que grabar Resistiré hasta fin de año. Su día empieza muy temprano y
termina al atardecer. Antes de llegar a casa, y esto es ineludible, pasa por la
casa donde están viviendo sus padres -Antonio, que dejó de trabajar, y su esposa
ahora viven en Barrio Norte- y luego compra algún regalo para Nancy, Luca y
también para Morena. "Pablito tomó algunas clases del curso pre-parto, porque en
ese momento quiere estar al lado de Nancy, aunque no lo terminó. Igual Morena va
a nacer por cesárea al igual que Luca".
MATRIMONIOS Y ALGO MAS. Atrás quedaron los primeros besos de la ficción, el
casamiento en la tira Los Buscas, el darse cuenta de que se extrañaban, que
entre ellos empezaba a nacer un sentimiento mutuo, el noviazgo, la convivencia.
Atrás quedó el secuestro del papá de Pablo, que les sirvió para intensificar y
fortalecer la pareja. De hecho, Nancy quedó embarazada enseguida. Una vez que
nazca Morena, el plan es comprar una casa con más espacio. Ya la están buscando
por Palermo, Colegiales o Belgrano. Otra deuda que se han prometido cancelar es
la del matrimonio. Pablo y Nancy se lo confesaron a sus íntimos más íntimos:
"Después del nacimiento de Morena, nos vamos a casar".
Y seguramente, así será.
El es un inquieto padre primerizo y se emociona ante cada nuevo síntoma de su mujer. Ella, mamá con experiencia, lo tranquiliza. Los dos están muy ansiosos y ya quieren conocer la carita de Morena.
Nancy lleva todos los días a Luca Martin al jardín, después aprovecha el tiempo para estudiar música. Morena nacerá a fines de agosto, por cesárea, en la clínica Suizo Argentina.
