-Usted ostenta un título más que polémico: el verdugo de la convertibilidad. Después de once años de uno a uno, le cortó la cabeza. ¿Cómo se siente, ministro?
-En realidad, la perdimos hace varias semanas. Desde luego, salir de ella es cambiar muchas cosas…
-Entre ellas, devaluar. ¿Es la más peligrosa de las medidas?
-Estamos devaluando, pero también estamos buscando ayuda para los sectores más vulnerables, y frenando las presiones.
-¿Conclusión?
-Vamos a empezar a crecer.
REMES EN EL DIA D
"A ningún economista del mundo le desearía la suerte de este hombre: ser el enterrador del uno a uno…". La frase, lanzada por un anchor men de la televisión italiana, resonó en la Casa Rosada, que rezumaba de periodistas extranjeros de todo pelo y color. Algunos, asombrados por el lujo de los salones (pisos de roble de Eslavonia, mármoles de Carrara, vitraux florentinos, mucho dorado a la hoja), símbolos de la vieja y perdida opulencia. Y en eso estaban, cuando entró Jorge Remes Lenicov. Saco color crema, pantalón y camisa al tono. Remes Lenicov, ministro de Economía de Eduardo Duhalde. Remes Lenicov, dueño del más totémico, caliente y frágil de los sillones del poder nativo.
¿SOLOS EN EL MUNDO?
-¿Hay un programa económico que saque al país de la crisis, o por ahora sólo hay aspirinas y cataplasmas?
-Hay, repito, un importante cambio de rumbo.
-¿Un cambio imprescindible?
-Sí. Lo que se venía haciendo… no daba para más.
-Muchos dicen que las medidas sacan a la Argentina del mundo. La aíslan. ¿Es cierto?
-Estas son medidas de excepción, sí. Pero el objetivo es armar una economía igual a la que rige en los países civilizados.
-El adiós a la convertibilidad es, para muchos argentinos, una tragedia, o la viven como tal. ¿Cuáles son sus ventajas concretas?
-Una devaluación del 40 por ciento beneficia a la industria agropecuaria, a la del calzado, a la del pollo y a la del cerdo.
-¿Por qué?
-Porque pueden exportar. En general, beneficia a todos los sectores que exportan y a todos los que competían en inferioridad de condiciones con los precios internacionales.
MADE IN LA PLATA
Apuntes para la biografía de un ministro. Nació en La Plata (23 de septiembre del 48). Mujer: Marta, abogada. Hijos: Pablo, arquitecto, 28; Matías, estudiante de Ciencias Económicas, 23, y Magalí, estudiante de Arquitectura, 19. Clase media: hijo de Mauricio, fotógrafo. Hincha de Gimnasia. Casa en la calle 34. Veranos en Pinamar o Mar del Plata. Pasiones: cine, lectura, trote y bicicleta. Fue ministro de Economía de los ex gobernadores Antonio Cafiero y de Eduardo Duhalde. Es presidente de la
AFJP Orígenes.
HORA DE PRIORIDADES
-¿Las nuevas medidas crearán fuentes de trabajo?
-Sin duda. Más trabajo para más argentinos.
-¿Hoy, ahora, cuál es la prioridad número uno?
-El equilibrio fiscal. Y también los planes de emergencia social y alimentario. En definitiva, medidas compensatorias para los sectores más vulnerables: los de recursos más bajos, y las pequeñas y medianas empresas.
-¿Hasta qué punto es posible pedirle más sufrimiento a la gente?
-Luego de cuatro años, no podemos pedirle más paciencia…
-¿Entonces?
-Lo único que pedimos es comprensión y consideración. Que la gente crea que las medidas que estamos tomando son consistentes, y que permitirán salir de la recesión.
-Muchos aseguran que salir de la recesión raya el milagro…
-No hay milagros. No se puede anunciar bienestar de hoy para mañana. Pero además…
-¿Además?
-Estas son las únicas medidas que podemos tomar. Las únicas.
-Algunos dicen que estas medidas son una batalla de pobres contra ricos. ¿Tienen algo de razón?
-Hace mucho que los pobres vienen haciendo esfuerzos. Bueno: esta vez les pedimos un aporte solidario a los más ricos.
TODA LA CARNE AL ASADOR
Remes Lenicov es parrillero vocacional. Escenario habitual: el fondo de su casa. Pero el sábado 5 de enero, noche de Reyes, cambió el menú por empanadas, ensalada de papa y huevo, y helado, repartido en la quinta de Olivos entre una treintena de dirigentes peronistas que fueron a saludar a Duhalde. Pero Remes hizo mutis por el foro y comió en otro rincón de la quinta con Rodolfo Gabrielli (Interior) y Jorge Capitanich (jefe de Gabinete). A esa hora, según testigos, "la presión de los lobbies era avalancha, y los teléfonos ardían…". Pero Remes, mientras empezaban a crepitar las brasas (asado en apoyo a Felipe Solá), proclamó:
-Hasta que no salga la ley…, no atiendo el teléfono ni aunque me llame el Espíritu Santo.
Alguien, claro, preguntó por qué. Respuesta:
-Porque yo sé muy bien cuándo tengo que atender…, y cuando se trata de
presiones.
CON LA LEY EN LA MANO
Por fin, la convertibilidad murió al anochecer. Y siguieron las preguntas:
-¿Qué pasará con el corralito?
-Vamos a ir flexibilizando… Primero, las cajas de ahorro-salario, para que en los próximos días la gente pueda retirar algo más que los mil pesos autorizados, tal vez hasta 1.500. Y luego seguirán los plazos fijos y las cajas de ahorro normales.
-Hoy, ahora, en el umbral del cambio, ¿cuál es su radiografía del estado económico?
-La Argentina tiene tres problemas básicos: depresión creciente, deuda externa y falta de instrumentos de política económica.
-¿Qué consecuencias directas tiene ese trípode?
-La depresión disminuye cada día más el nivel de actividad y aumenta el desempleo y la pobreza (no olvidar que la economía colapsó, quebró…). Respecto de la deuda externa, ya declaramos el default, y estamos en un proceso transitorio de cesación de pagos.
-¿Transitorio?
-Sí. Porque vamos a renegociar los términos con los acreedores.
-¿Y la tercera pata?
-Sí, la falta de instrumentos políticos. El déficit fiscal de 2001 llegó a los 11 mil millones de dólares, y el provincial, a 3.500 millones. Resultado: es imposible hacerles frente a las necesidades básicas, porque las políticas monetarias y financieras tienen límites…
-Sin embargo, la bronca de la gente está circunscripta al corralito. La bronca y la ansiedad…
-Sí. Tenemos el corralito, y un Banco Central con poca capacidad adicional para asistir al sistema financiero.
-Entonces, ¿cuál es la salida?
-Nos proponemos una serie de objetivos de corto plazo, y otra para este y el próximo año. En el corto plazo tenemos que sincerar la situación, destrabar la producción y desarrollar el crecimiento.
-¿Es posible, cuando usted mismo admite que el país está quebrado?
-Tenemos un déficit fiscal enorme y un Banco Central que no puede ni debe emitir más plata…
-Un panorama más que negro.
-Sí. Y por eso hay que -sí o sí- sincerar la situación del país. Decir la verdad (toda la verdad) es el primer paso para empezar a crecer.
por Alfredo Serra y Alejandro Sangenis
informes: Darío Ríos
fotos: Diego García, Julio Ruiz y Eduardo Sarapura
Teníamos que sincerar nuestra economía", explicaría después.">
Domingo 6 de enero, 20:32 horas. Salón Blanco de la Casa de Gobierno. Jorge Remes Lenicov se apresta a confirmar el fin de la convertibilidad. "Teníamos que sincerar nuestra economía", explicaría después.
Lunes 7 a la mañana. Reunión de Gabinete. Preside Duhalde. Lo acompaña Chiche, su mujer. Pero el gran protagonista es Remes Lenicov: el hombre al que todo un país mira…
