Uno más, y van... En este preciso instante, alguien le hace otro clic al video del baile del caballo. Gangnam Style se lanzó el 15 de julio y en tres meses se convirtió en sensación. Alcanzó las 600 millones de visitas en YouTube, es el más visto de 2012 y si sigue creciendo al paso que viene, a fines noviembre superará a Baby, de Justin Bieber, que tiene 800 millones de visitas y se convertirá en el más visto de la historia. Su intérprete es Psy, un surcoreano algo feúcho que por estos días se dedica a contar los dólares que le deja ese ir y venir a caballo.
Su mezcla de hip-hop, música electrónica y pop habla –en tono de humor– de la relación entre un chico común y una chica concheta que vive en el barrio de Gangnam, de Seúl, una especie de Beverly Hills coreano, donde un departamento de tres ambientes cuesta 720.000 dólares. El video fue filmado en 48 horas en diferentes locaciones del vecindario y muestra a Psy rapeando entre caballos, sentado en un inodoro y, al final, conquistando a Kim Hyum-a, la pelirroja del grupo pop coreano 4Minute. Dice que ser Gangnam style es sinónimo de ser cool y funciona como manifiesto sobre un amor frívolo, además de como parodia al materialismo. Hay que verlo.
JINETE ACAUDALADO. Psy es un surcoreano de 34 años para nada atractivo, algo gordito y vegetariano. Su nombre real es Park Jae-Sang. Psy, el artístico responde a una abreviatura de “psicópata”, por el primero de sus seis discos, From the Psycho World, editado en 2001. Nació y se crió en Gangnam, ¡obvio! Por eso sabe de lo que habla. Hace siete años que está casado con Yoo Hye Yeon, su novia de la juventud. Tiene mellizas de cuatro años, a las que intenta no exponer mucho ante la prensa. Aunque hace poco contó que, en plena vorágine laboral –giras, shows y eventos– sus hijas le espetaron: “Papá, ¿por qué no vivimos juntos de ahora en adelante?”.
A más de diez años de haber lanzado su primer disco, el coreano no es un improvisado. Con su éxito destrozó al K-Pop –música comercial surcoreana–, de chicos lindos que pasaron por el quirófano. Además, sabe de contratiempos. Tras su primer disco fue multado por “contenidos inapropiados”, y el segundo, Ssa 2 –de 2002– fue prohibido para menores de 19 años. Epoca en la que también lo arrestaron por tenencia de marihuana, lo que le impidió ir al entierro de su padre. Además, en 2003 su carrera hizo otra pausa, cuando ingresó al servicio militar para tareas técnicas. En cambio, por estos días, con Psy’s Best 6th, su sexto disco, la única prohibición es no bailar. El look de su éxito: mocasines bicolores –nunca con medias– smoking oscuro, camisa con alforzas, cinturón con hebilla, moñito y anteojos de sol. Clave: la sonrisa canchera y sobradora.
¿Sus gustos musicales? Creció escuchando Bon Jovi, Aerosmith y Guns n’ Roses y su ídolo fue siempre Freddie Mercury, de quien dice haber aprendido su faceta de showman. Psy no reniega del éxito de su Gangnam Style, pero asegura que sus ambiciones pasan más bien por el rock and roll. “En los Estados Unidos y el mundo sólo me conocen por un tema y video graciosos. Pero en Corea tengo una banda de rock y hago grandes recitales”, asegura este fenómeno que estudió –aunque no completó la cursada– en la Universidad de Boston y en el Berklee College of Music. Cuando le preguntaron cómo se le ocurrió semejante hitazo, Psy contesta: “Estudié mucho para crear algo nuevo. Tardé un mes en encontrar el paso del caballo. Salió tras treinta noches de reuniones con coreógrafos”.
GLOBAL Y ACLAMADO. Así como lo hizo Macarena, del grupo español Los del Río, Gangnam Style se coló en la escena política y atravesó de norte a sur el mundo del espectáculo. Lo bailan desde stars como Britney Spears hasta el secretario general de las Naciones Unidas, el también coreano Ban Ki-moon, pasando por el futbolista brasileño Neymar. La primera tuvo la posibilidad de aprenderlo de primera mano en el programa de Ellen DeGeneres, con récord de audiencia en los Estados Unidos. Mientras que el secretario general de la ONU aseguró estar algo celoso de que su coterráneo lo haya desplazado en popularidad. Fue hace dos semanas, en el marco de una reunión organizada por la ONU para debatir sobre el calentamiento global y que terminó, como no podía ser de otra manera, con el líder del organismo haciendo la coreo del baile del caballo. ¿Otro fan? El tenista Novak Djokovic, que festejó la obtención del Abierto de Beijing bailándolo junto a los voluntarios del certamen chino. Igual que su colega, María Sharapova, que grabó un video sobre el hit. También se declaran fans Nelly Furtado, Kate Perry y Robbie Williams. Furor mundial que sólo explicará el tiempo.
Pero que para Psy ya se traduce en un jugosísimo contrato para protagonizar la nueva campaña de Samsung y así sumar dígitos a sus casi 10 millones de dólares recaudados
Psy rapea en las caballerizas de una mansión en el lujoso barrio de Gangnam, en Seúl. Cultivar el “Gangnam style” implica tener un estilo cool. La canción es una parodia al materialismo de las clases acomodadas de Corea del Sur. ¿Vos sos Gangnam?
Se formó escuchando a Bon Jovi, Aerosmith, Guns n’ Roses y Freddie Mercury, de quien aprendió a ser showman. Asegura que el video clip de Gangnam Style es sólo parte de su carrera, que sus ambiciones pasan más bien por el rock and roll. En 2001 editó su primer disco y antes de su hit todavía usaba atuendo coreano, esto es... ¡hace cinco meses! El 4 de octubre pasado, bailó ante 80 mil fans en Seúl.
En los últimos MTV Music Awards, donde fue uno de los más requeridos.
