La visita presidencial a China para participar de la cumbre del G-20 tuvo a Mauricio Macri y a su mujer, Juliana Awada, con una agenda apretadísima, que incluyó actos oficiales, encuentros con sus pares del mundo, entre ellos Barack Obama y Vladimir Putin, y también visitas por templos milenarios y casas del té, así como una amena bicicleteada. Durante la gira, de la que también formó parte el vocero presidencial, Iván Pavlovsky, el look de la primera dama fue comentario permanente, tanto en la reunión con las esposas de otros líderes mundiales, como en los paseos guiados y las caminatas improvisadas.
“Para mí fue un orgullo y una alegría haber podido acompañar al Presidente en un viaje tan importante como éste y que abre tantas puertas para el desarrollo del país”, señaló Awada poco antes de emprender el regreso a la Argentina y luego de varios actos oficiales en Hangzhou, entre ellos, la cena de bienvenida ofrecida por el presidente Xi Jinping a sus pares y las delegaciones oficiales, la reunión oficial con el G-20, y acuerdos importantes como la firma de un compromiso para la lucha contra el HIV.
Con outfits de Graciela Naum, Awada se lució en una agenda paralela organizada por la primera dama china, Peng Liyuan, en la que conoció los museos del Té y de la Seda, el Templo Lingyin, la Universidad de Zhejiang y la Academia China de Artes.
Además, para conocer las calles de Hangzhou, Awada y Macri anduvieron en bicicleta y recorrieron rincones de la tradicional ciudad. “China es muy linda y fascinante. Se trata de una cultura totalmente distinta a la nuestra, y nos deja muchas enseñanzas”, explicó la primera dama. El año que viene será nuestro país el anfitrión de la cumbre de mandatarios del mundo.
Ella en calzas; él en short. La entretenida bicicleteada de Mauricio
y Juliana por las calles de Hangzhou, en la provincia de Zhejiang
En el encuentro con las primeras damas del G-20, Juliana lució un vestido estampado estilo Boho, también by Ménage à Trois.
De blanco, con
una falda plisada,
o de jeans y blusa,
Awada dio la nota.
“Extraordinario y
milenario”, así calificó
al Museo del Té, una
de sus visitas por
fuera de la agenda
oficial.
A la derecha,
en su recorrido por el
templo Lingyin junto
a los monjes budistas
que oficiaron de guías.
Para el acto de apertura de la cumbre
del G-20, Awada lució un diseño en marfil creado por Ménage à
Trois, con pequeñas incrustaciones, y sus clásicos stilettos.
