El 2004 fue un año muy importante en las vidas de Celeste Cid y Emmanuel
Horvilleur. Afianzaron su relación, tuvieron un hijo -André nació el 2 de
septiembre- y se mudaron juntos, apenas unos días antes de salir de vacaciones.
El 21 de diciembre, el mismo día que empezó el verano, los tres se instalaron en
La Pedrera, un balneario a unos cien kilómetros de Punta del Este. Su plan era
pasar una Navidad en familia, lejos de Buenos Aires y de los circuitos fashion.
El domingo 19, él cumplió con su último compromiso laboral: tocó en el festival
que Roho (el peluquero de los rockeros) organizó en el Jardín Japonés para
celebrar los diez años de su peluquería.
Durante la primera semana, la pareja evitó el mar y la arena. Celeste no es muy
devota del sol ni de la playa. Y André tiene sólo cuatro meses. Los paseos al
atardecer fueron por la zona de barrancos, largas caminatas por la rambla,
algunas paradas en la placita para poder hamacar a su hijo y unos chapuzones en
la pileta climatizada del hotel.
Eligieron este balneario porque casi no tiene vida social. Quieren aprovechar
sus vacaciones para estar en contacto con la naturaleza, visitar la feria de los
artesanos, y sentarse a tomar algo y disfrutar de la tranquilidad de las tardes
en algún barcito cercano al hotel La Pedrera, donde nadie los reconoce. También
se quedaron asombrados por la rica historia que tienen las casas del lugar
(algunas fueron construidas en 1898) y se detuvieron frente a ellas para sacarse
algunas fotos.
Estarán en Uruguay hasta los primeros días de enero y, después del 4, volverán a
Buenos Aires para comenzar con sus trabajos del año 2005. Celeste empezará con
los ensayos para el Festival de Cultura Griega, de la Fundación Konex, ya que
actuará en la obra inspirada en los textos de Eurípides y Racine, dirigida por
Alejandro Ullúa. Emmanuel Horvilleur tiene shows programados para la segunda
quincena de enero por la costa Atlántica. "André nos cambió la vida, por eso
queremos dedicarnos a él lo máximo posible en los días libres que nos quedan.
¿Año Nuevo? Seguramente lo recibamos los tres solos. La primera Navidad con
nuestro bebé fue inolvidable", les contaron a sus íntimos.
Celeste, Emmanuel y André en uno de sus primeros paseos por Uruguay. Decidieron tener unas fiestas tranquilas, lejos del ruido y cerca de la naturaleza.
Celeste y Horvilleur son padres primerizos. Ella no llevó niñera y no se separa del bebé ni un instante. Emmanuel también está baboso con André, según cuentan sus íntimos. Por la tarde, caminan y lo llevan a los juegos.
