Amanece temprano, tipo siete menos veinte, siete menos diez de la mañana. Sin
alarma alguna. Al contrario. “Una costumbre que me quedó de la temporada
anterior”, dirá luego. “Hay poco ruido, nace la claridad. Me encanta
madrugar”, agregará. Prepara mate amargo, porque el dulce es para los
gringos, le enseñaron. Despierta con uno a Isabel Macedo, hojea el diario,
desayunan, despide a su mujer (que parte rumbo a las grabaciones de
Floricienta) y, en silencio, sin artefactos que distraigan la concentración,
toma el guión de Visitando al señor Green y repite la letra, nunca
delante del espejo, “porque empezás analizándote los gestos y terminás
mirándote el granito que te salió”, ampliará ante GENTE, consciente de que
aunque no esté saliendo al aire ni forme parte de la feroz competencia actual,
Jorge Facundo Arana Tagle (33) es noticia al cuadrado: acaba de ser consagrado
Mejor Actor Protagónico en el Festival y Mercado de la Telenovela
Iberoamericana (FyMTI) y acaba de enterarse de que Padre Coraje se
convirtió en el programa con mayor cantidad de nominaciones –20– en la historia
de los Martín Fierro que entrega la Asociación de Periodistas de
Televisión y Radiofonía de la Argentina (APTRA).
“Un doble orgullo”, acepta ahora en la cantina Grappa, tras estacionar
su flamante camioneta Chevrolet S10 limitada negra e invitar sendos cafés
cortados al fotógrafo y al redactor “para evitar una guardia periodística y
charlar tranquilos”. “Doble orgullo –avanza–, por el producto que
generamos y el laburo que brindamos todos. A mí no me gusta encarar las cosas en
función de los premios, sino en función de una historia, de un cuento. Claro que
si llegan, los disfruto en nombre propio y del gran equipo que conformamos. ¿Si
me siento el rey del mundo como James Cameron la vez que ganó los once Oscars
por Titanic? No, sólo me siento un defensor a ultranza de la ficción”,
avanza el muchacho que resolvió dejar la pantalla chica hasta mediados de 2005,
en que comenzará a grabar un unitario para una productora, un canal, un día y un
horario que prefiere resguardar a candado.
Entretanto, las jornadas del actor del momento saben a almuerzos livianos y
paseos a Pampa, su pastor húngaro; a tardes de entrenamiento bajo las órdenes de
Marcelo Attaguile (el personal trainer le hizo recuperar a Arana los tres
kilos que adelgazó durante el verano. Hoy suma 76), y a ensayos grupales (son
cuarto a la semana, previos al estreno de junio en el Multiteatro), en
compañía del otro protagonista de Visitando al señor Green, Pepe Soriano,
del director Santiago Doria y de los inversionistas, Baltazar Jaramillo y Bruno
Pedemonti. “Mi última obra fue en 1992, estractos de textos del dramaturgo
noruego Henrik Ibsen, en Plaza Francia, ‘a la gorra’, o ‘al estuche de mi saxo’”,
rememora quien en el crepúsculo sale a cenar con amigos, regresa a su PH de
Palermo Hollywood (“Cuando llegué en el 99 era Palermo Bronx”, bromea),
aguarda el retorno de su chica, mira noticieros, bastante ficción (“Me mata
Hombres de honor”), y anochece temprano, tipo doce menos veinte, doce menos
diez. Sin problema alguno. Al contrario. 
Palermo Hollywood, viernes a las 13:45. Arana sale de su casa rumbo a los ensayos de Visitando al señor Green. “¿Y si en lugar de ponerme una guardia periodística, nos tomamos un café y charlamos tranquilos”, propone.
Modelo 2005 Estrenó camioneta. Se trata de una Chevrolet S10 limitada que “pronto
empezaré a ensuciar en una de mis recorridas por el país”, adelanta quien el
domingo 3 de abril, en el Showroom Copacabana del Hotel Conrad de
Punta del Este logró el premio como Mejor Actor Protagónico, halago que
entregó Carlos Perciavalle, y recibió, en nombre del rubio porteño –que no pudo
viajar al Uruguay–, su compañera de Padre Coraje, Julia Calvo.
